El líder norcoreano, Kim Jong Un, despidió a varios altos funcionarios debido a un “grave incidente” en la lucha contra la pandemia del covid-19, según anunció el miércoles la agencia oficial KCNA.
Los funcionarios han “provocado un grave incidente que supone una enorme crisis para la seguridad de la nación y su pueblo”, dijo Kim durante una reunión del politburó, citado por KCNA, que no dio detalles.
Este lunes, la televisión estatal norcoreana emitió un comentario de un ciudadano sobre el estado “demacrado” de Kim Jong Un, algo muy inusual en un país donde siempre se ha prohibido hablar en público sobre la salud y la vida personal del líder.
Según los analistas, los comentarios muestran que las autoridades quieren utilizar el cambio de peso de Kim para reforzar la lealtad al régimen.
El país está más aislado que nunca debido a las medidas contra el coronavirus y este mes ha admitido que se enfrenta a una crisis alimentaria.
Conocido por ser un fumador empedernido, Kim Jong Un sufría de obesidad y su peso parecía aumentar constantemente en los últimos años.
Sin embargo, las últimas imágenes difundidas por la agencia oficial de noticias de Pyongyang, KCNA, y por la televisión estatal le muestran más delgado.
La vida personal de Kim es un tabú para los medios de comunicación estatales de Corea del Norte, pero la KCTV emitió la semana pasada un clip en el que un residente no identificado de la capital afirmaba que todos en el país estaban “destrozados” por su estado “demacrado”.
“Ver a nuestro respetado secretario general con un aspecto demacrado es lo que más rompe el corazón de nuestro pueblo”, dijo.