El presidente Andrés Manuel López Obrador insistió este miércoles en presionar al Instituto Nacional Electoral (INE) para que lleve a cabo la consulta para la revocación de su mandato y dijo que el árbitro electoral -fundamentalmente, el consejero presidente Lorenzo Córdova-, debe rectificar su decisión de posponer el procedimiento, pues está violando la Constitución.
El titular del Ejecutivo federal recordó este miércoles, en su conferencia matutina, que el acuerdo del INE no fue avalado por unanimidad por el Consejo General y que, en la votación, hubo una decisión dividida de 6 votos contra 5. Por ello, afirmó que, en el INE, “deberían, sobre todo el presidente (Lorenzo Córdova), tener la suficiente capacidad y humildad, sobre todo la capacidad democrática, para rectificar” este aplazamiento, dijo.
El mandatario enfatizó, desde Palacio Nacional, que si el Congreso aprobó la creación de la Revocación de Mandato, “ninguna instancia gubernamental puede incumplir este mandato constitucional, bajo ningún pretexto, consideración o excusa, es un mandato constitucional y se tiene que cumplir”, insistió.
Al ser cuestionado durante su conferencia sobre el recurso de controversia constitucional interpuesto ayer martes por el diputado oficialista y presidente de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, Sergio Gutiérrez Luna en contra del acuerdo del INE, que propone posponer el referéndum revocatorio por falta de recursos; López Obrador dijo que confía en que el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) y la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) resuelvan este conflicto y, además, aseveró que la justicia le dará la razón, pues reiteró que el INE viola la Constitución.
Al expresar que la consulta “debe cumplirse”, el Presidente acusó al INE de tener una “actitud iracunda” y que, en lugar de facilitar la apertura de los canales democráticos, realiza “tácticas dilatorias”.
Agregó que el propósito de realizar esta consulta es hacer realidad la democracia y cumplir con la Constitución, al tiempo que aseguró que se trata de intereses superiores que no pueden dejarse de lado, y reprochó que no puede haber “un interés personal o de grupo, por legítimo que sea, por encima de un interés superior”.
Aunque la Ley Federal de Revocación de Mandato y Consulta Popular, que fue publicada el 14 de septiembre de 2021 en el Diario Oficial de la Federación (dof), fue impulsada por el propio presidente López Obrador y avalada en el Congreso por el bloque oficialista de Morena y aliados de los partidos Verde y del Trabajo, durante la pasada Legislatura, y consiste en preguntar a los ciudadanos si desean o no que el presidente continúe en el cargo.
Sin embargo, el partido fundado por el Presidente, Morena, a través de personajes afines, promueve la revocación de mandato, bajo el lema “Que siga la democracia”; mientras que la oposición califica este ejercicio como un acto engañoso que sólo busca medir la popularidad del Presidente, en el marco de la renovación de las gubernaturas en seis estados de la República.
Sobre el conflicto entre el Presidente y el INE, los partidos de oposición, PAN y PRD, anunciaron su apoyo al acuerdo emitido por este Instituto y pidieron al presidente López Obrador detener los ataques contra el árbitro electoral. A su vez, Mario Delgado, líder del partido en el poder, señaló que la oposición quiere proteger al INE para evitar que se realice un juicio político contra los consejeros electorales.
Delgado Carrillo dijo que la consulta de revocación de mandato “no es un asunto de pesos y centavos, en el fondo no quieren que se haga este ejercicio, están en contra, lo han dicho; no quieren que quede este precedente a favor del pueblo de México, que a la mitad de una administración el pueblo, si no está satisfecho, pueda mandar a un presidente a su casa”, dijo.