India se ha convertido en el epicentro mundial de la pandemia, con millones de nuevos casos a la semana, a pesar de ser uno de los principales fabricantes de vacunas del mundo. El país asiático se ha comprometido a producir al menos 886 millones de dosis de la vacuna de Oxford-AstraZeneca, que representan el 42% de todas las dosis que este laboratorio tiene previsto producir en todo el mundo (2.113 millones); sin embargo, por el momento, India sólo recibirá el 4% de estas vacunas. La realidad es que la mayoría de estas dosis irán a parar a los países ricos de la Unión Europea y Estados Unidos.