Los deícticos son términos cuyo significado depende del contexto y solamente puede conocerse en función del hablante. Son elementos gramaticales que permiten concretar la deixis, que es el señalamiento a una expresión lingüística, un tiempo, un sitio o una persona.Los deícticos pueden ser de tres tipos: de tiempo, de persona y de espacio.
Deícticos de tiempo
Los deícticos de tiempo son adverbios como hoy, mañana y ayer. Estos términos nos permiten referirnos a situaciones temporales precisas según el hablante, como en la frase “Hoy vamos al cine”, donde el deíctico “hoy” nos indica que la acción ocurre en el día presente.
Deícticos de persona
Por otro lado, los deícticos de persona son pronombres personales, demostrativos y posesivos. Estos nos ayudan a señalar a quién nos referimos en una situación comunicativa. Por ejemplo, en la frase “El libro es mío”, el deíctico “mío” indica que el libro pertenece a la persona que habla.
Deícticos de espacio
Finalmente, los deícticos de espacio son adverbios de lugar como aquí, allí y más lejos. Estos nos permiten señalar la ubicación de un objeto o evento en relación con el hablante. Un ejemplo sería la frase “Voy a comer aquí”, donde el deíctico “aquí” indica que la acción de comer se realizará en el lugar donde el hablante se encuentra.
Tipos de Deícticos y Ejemplos
Los deícticos son palabras que se utilizan para señalar algo en el espacio o en el tiempo. Estas palabras son muy útiles para situar y referirnos a personas, objetos o lugares. A continuación, te mostraremos los tres principales tipos de deícticos y ejemplos de cada uno:
1. Deícticos de Sujeto
Los deícticos de sujeto se refieren a las personas que realizan la acción en una oración. Hay dos tipos de deícticos de sujeto: los personales tónicos y los personales átonos.
- Personales tónicos: yo, mí, conmigo; vos, ti, tú, usted, contigo; ella, él, ello, sí, consigo; nosotras, nosotros, ustedes, ellos, ellas; ustedes; ellas, ellos, sí, consigo.
- Personales átonos: me, nos; te, se; lo, la, le, los, las, les, se.
Por ejemplo, en la oración “Yo gané la lotería el año pasado”, “yo” es un deíctico de sujeto personal tónico, ya que se refiere a la persona que realizó la acción de ganar la lotería.
2. Deícticos de Tiempo
Los deícticos de tiempo son adverbios que hacen referencia a un momento en el tiempo que ya ha sido mencionado previamente. Estos deícticos nos ayudan a ubicar eventos en el pasado, presente o futuro.
- Ejemplos de deícticos de tiempo: ahora, luego, antes, después, mañana, ayer, hoy, entretanto, anoche, aún, todavía, tarde, temprano, mientras, jamás, nunca, ya, enseguida, recién, anteriormente, posteriormente, frecuentemente.
Por ejemplo, en la oración “Ahora no puedo, tengo que estudiar”, “ahora” es un deíctico de tiempo que indica el momento presente en el que el hablante no puede hacer algo debido a sus responsabilidades.
3. Deícticos de Lugar
Los deícticos de lugar son adverbios que nos ayudan a referirnos a un espacio físico que ha sido mencionado previamente. Estos deícticos nos permiten situar objetos, personas o lugares en relación con otros elementos espaciales.
- Ejemplos de deícticos de lugar: allí, allá, aquí, acá, delante, al borde, detrás, encima, alrededor, debajo, lejos, cerca, abajo.
Por ejemplo, en la oración “Allí están tus apuntes”, “allí” es un deíctico de lugar que indica la ubicación de los apuntes en relación con el hablante.
Los deícticos son herramientas lingüísticas importantes para situarnos en el espacio y en el tiempo, permitiéndonos comunicarnos de manera más precisa. A través de los deícticos de sujeto, tiempo y lugar, podemos referirnos a personas, objetos y eventos de manera clara y concisa.
La función de los deícticos en el lenguaje
Los deícticos en el lenguaje tienen la importante función de señalar o indicar elementos del contexto de la comunicación. Las deícticas son expresiones lingüísticas como “yo”, “aquí” y “ahora” que se interpretan en relación con un elemento de la enunciación, como los interlocutores, las coordenadas de espacio y tiempo. Estas expresiones son frecuentes en las conversaciones cara a cara.
Según la teoría de la enunciación, el “yo-aquí-ahora” constituye el centro deíctico o punto cero de las coordenadas contextuales para la realización e interpretación de cada acto de comunicación. Esto significa que estas expresiones adquieren significado en relación con la persona que habla, el lugar donde ocurre la comunicación y el momento en el que se lleva a cabo.
Existen diferentes tipos de deíxis según el factor contextual que se señale. Por ejemplo, se pueden señalar los participantes en la comunicación, el momento o lugar de la comunicación, o incluso el propio texto. Además, se distingue la deíxis social, que refleja o establece la relación social entre los participantes en la comunicación, e incluye las fórmulas de tratamiento.
- Los deícticos son expresiones lingüísticas que señalan elementos del contexto de la comunicación.
- Según la teoría de la enunciación, el “yo-aquí-ahora” es el centro deíctico para la interpretación de cada acto de comunicación.
- Existen diferentes tipos de deíxis según el factor contextual que se señale, como los participantes, el momento o el lugar de la comunicación, o incluso el propio texto.
- La deíxis social refleja o establece la relación social entre los participantes en la comunicación y se manifiesta en las fórmulas de tratamiento.
El estudio de los deícticos establece interrelaciones entre gramática y pragmática, ya que adquieren sentido en las coordenadas espacio-temporales y personales en que se utilizan. Su aprendizaje contribuye al desarrollo de la competencia comunicativa y sociocultural.
Ejemplos comunes de deícticos en español
Los deícticos son palabras que señalan o hacen referencia a otras palabras en un mismo texto. Son elementos clave para establecer relaciones entre las palabras y dotar al texto de unidad textual y sintáctica. En español, existen varios tipos de deícticos que son ampliamente utilizados:
- Pronombres personales: como “yo”, “tú”, “él”, “ella”, “nosotros”, “ustedes”, entre otros. Estos deícticos se utilizan para referirse a las personas que participan en la comunicación.
- Pronombres demostrativos: como “este”, “ese”, “aquel”, “esto”, “eso”, “aquello”, entre otros. Estos deícticos indican la ubicación o cercanía de los objetos o personas a los que se refieren.
- Pronombres posesivos: como “mío”, “tuyo”, “suyo”, “nuestro”, “vuestro”, entre otros. Estos deícticos señalan la posesión o pertenencia de algo.
- Determinantes: como “el”, “la”, “los”, “las”, “mi”, “tu”, “su”, “este”, “ese”, “aquel”, entre otros. Estos deícticos acompañan a los sustantivos y determinan su género, número o ubicación en el espacio y en el tiempo.
- Adverbios de lugar y tiempo: como “aquí”, “allí”, “ahora”, “entonces”, “después”, “antes”, entre otros. Estos deícticos sitúan los acontecimientos y objetos en relación al espacio y al tiempo.
Estos ejemplos de deícticos son fundamentales en la cohesión de un texto. Por un lado, los pronombres personales permiten referirse directamente a las personas involucradas en la comunicación, evitando repeticiones innecesarias. Por otro lado, los pronombres demostrativos y posesivos ayudan a identificar y ubicar objetos y posesiones en relación al contexto. Además, los determinantes y adverbios de lugar y tiempo complementan la información proporcionando detalles adicionales sobre los sustantivos y eventos presentados.
Es crucial tener en cuenta que el uso adecuado de los deícticos en un texto contribuye a su coherencia y comprensión. Sin embargo, es necesario evitar la repetición excesiva de las mismas palabras para no denotar un vocabulario limitado. Por lo tanto, es recomendable utilizar una variedad de deícticos y recursos léxicos para enriquecer la expresión y evitar la monotonía en la escritura.
Uso de los deícticos en la comunicación oral
En la comunicación oral, los deícticos desempeñan un papel fundamental al permitirnos referirnos a elementos o conceptos que solo pueden comprenderse en función del contexto y la situación comunicativa. Las palabras deícticas, como los pronombres personales (“tú”, “nosotros”, “ustedes”), los adverbios de lugar (“aquí”, “allí”, “ahí”) y los adverbios de tiempo (“actualmente”, “hoy”, “ayer”, “ahora”), son ejemplos claros de cómo utilizamos estos recursos en nuestro lenguaje cotidiano.
La deixis, fenómeno estrechamente relacionado con los deícticos, se clasifica en diferentes tipos según su referencia. Por un lado, encontramos la deixis social, la cual se refiere a un participante y puede tener una función distintiva en la relación social. Un ejemplo de esto es el uso de “usted” en contraste con “tú”, donde cada pronombre establece un nivel de formalidad y cercanía. Por otro lado, la deixis personal se refiere al papel que desempeña un participante en la comunicación, pudiendo ser de primera, segunda o tercera persona. Además, la deixis de lugar permite situar a un participante en el espacio, indicando cercanía o lejanía, mientras que la deixis de tiempo se refiere a un momento específico.
Es significativo destacar que la deixis puede ser anafórica o catafórica. La deixis anafórica se presenta cuando un pronombre hace referencia a una palabra mencionada anteriormente en el texto, mientras que la deixis catafórica ocurre cuando el pronombre anticipa la mención de una palabra que aparece posteriormente. Ambas formas son utilizadas para mantener la coherencia y la comprensión en la comunicación oral.
Uso de los deícticos en la comunicación escrita
Los deícticos son palabras o expresiones lingüísticas que se utilizan para referirse a elementos específicos en la comunicación. En el contexto de la comunicación escrita, los deícticos juegan un papel fundamental en la señalización y el establecimiento de la referencia.
La deixis es la parte de la semántica y la pragmática que estudia el uso de los deícticos en la comunicación. Estas palabras, como “tú”, “hoy”, “aquí” o “esto”, cumplen la función de indicar personas, situaciones, lugares, entre otros elementos. Al utilizar los deícticos en la escritura, el escritor puede establecer una clara relación con el contexto y expresar su intención comunicativa de manera precisa.
Existen diferentes tipos de deixis que se utilizan en la comunicación escrita. La deíxis personal se expresa con pronombres de primera y segunda persona, así como con pronombres posesivos. Por otro lado, la deíxis temporal se establece mediante adverbios, locuciones, sintagmas adverbiales y morfemas de tiempo que indican el presente, el pasado y el futuro. Asimismo, la deíxis espacial se formula mediante adverbios de lugar, demostrativos y verbos de significado locativo.
Función de los deícticos en la narrativa
La función de los deícticos en la narrativa es esencial para caracterizar el comportamiento discursivo de la deixis espacial en relatos conversacionales. Los deícticos son percibidos como “indicios” que adquieren valores distintos a partir de la situación comunicativa donde son empleados. En este sentido, los deícticos son utilizados para crear un sentido de inmediatez, perspectiva y compromiso en la narrativa.
En la narrativa, los deícticos espaciales codifican las referencias locativas de los enunciados en relación con la situación y orientación física de los participantes en el acto de habla. Estos deícticos incluyen:
Pronombres demostrativos:
- Este
- Ese
- Aquel
Adverbios demostrativos de lugar:
- Aquí
- Ahí
- Allí
Verbos deícticos:
- Acercarse
- Alejarse
- Señalar
- Apuntar
- Mostrar
Otras expresiones con significado deíctico-espacial:
- Adverbios nominales transitivos e intransitivos
- Frases preposicionales locativas
- Sustantivos
- Adjetivos
La utilización de estos deícticos en la narrativa permite al lector situarse en el espacio y las acciones descritas, generando una sensación de vivacidad y cercanía con la historia. El uso de pronombres y adverbios demostrativos, por ejemplo, ayuda a enfocar la atención del lector en un lugar específico, mientras que los verbos deícticos transmiten movimientos y acciones que ocurren en el espacio narrado. Esto crea un sentido de inmediatez y perspectiva, permitiendo al lector sentirse más involucrado en la historia y experimentarla de manera más vívida.
Uso de deícticos en el discurso político
Los deícticos son elementos lingüísticos que se utilizan en el discurso político para establecer conexiones, manipular la percepción y enfatizar ciertas ideas. Estas herramientas lingüísticas actúan como puntos de referencia que permiten al emisor del mensaje relacionar diferentes conceptos y orientar la atención del receptor hacia aspectos específicos. En el ámbito político, los deícticos se utilizan estratégicamente para influir en la opinión pública y transmitir un mensaje persuasivo.
Un ejemplo común del uso de deícticos en el discurso político es el uso del pronombre “nosotros” para establecer una identificación entre el emisor y el receptor. Al utilizar este pronombre, el político pretende crear una sensación de pertenencia y unidad, generando empatía y respaldo por parte del público. Por ejemplo, un político podría decir: “Nosotros, como pueblo, debemos unirnos para enfrentar los desafíos que enfrentamos”. En este caso, el pronombre “nosotros” incluye al político y al público, creando una sensación de colaboración y responsabilidad compartida.
Además, los deícticos espaciales también se utilizan para manipular la percepción en el discurso político. Por ejemplo, el uso de la palabra “aquí” o “allí” puede implicar una ubicación geográfica específica y generar una asociación emocional con ese lugar. Un político podría decir: “Aquí, en esta ciudad, hemos logrado grandes avances en la reducción de la pobreza”. En este caso, el uso de “aquí” enfatiza los logros del político en esa ciudad en particular, generando una sensación de cercanía y familiaridad con el público local.