JERUSALÉN. El Gobierno israelí aprobó hoy aceptar la propuesta de mediación de Egipto para una “tregua bilateral” con Hamás, “sin condiciones”, anunció la Oficina del Primer Ministro en un comunicado.
El alto el fuego entraría en vigor a las 2:00 hora local del viernes (23:00 GMT del jueves), según medios israelíes, lo que pondrá fin a once días de escalada entre el Ejército israelí y las milicias palestinas en Gaza, que ha causado 232 muertos en la franja y 12 en Israel.
El movimiento islamista Hamás aún no ha confirmado este posible cese de hostilidades: “Seremos nosotros los que anunciemos la verdad sobre el alto el fuego y no la ocupación (israelí)”, dijo en un comunicado.
Los miembros del Gabinete de Seguridad, incluido el Jefe del Estado Mayor y los altos mandos militares, acordaron aceptar la propuesta de Egipto para el cese de las hostilidades tras elogiar lo que consideraron “grandes logros” de Israel en la campaña militar en Gaza.
Los rumores sobre esta posible tregua habían cobrado fuerza en las últimas horas, especialmente después de que el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, convocara esta tarde a su Gabinete de Seguridad, a pesar de su declaración anterior de que estaba a favor de continuar la ofensiva.
Esta mañana, un portavoz del movimiento islamista Hamás aseguró a Efe que la tregua “probablemente tendrá lugar pronto”, cuando desde hace días los mediadores internacionales, especialmente Egipto y la ONU, han intensificado sus esfuerzos para restablecer la calma tras once días de violencia.
Los actuales enfrentamientos, que comenzaron el 10 de mayo, se han cobrado ya la vida de al menos 232 palestinos en la Franja, entre ellos 65 niños y 39 mujeres, y han herido a más de 1.900 personas, víctimas de los intensos bombardeos israelíes.
En Israel, 12 personas -entre ellas dos menores- han muerto como consecuencia del lanzamiento de cohetes desde el enclave por parte de las milicias palestinas.
Israel había rechazado hasta ahora esta tregua y Netanyahu reiteró ayer su intención de continuar con la operación hasta conseguir sus objetivos de desmantelar la estructura militar de Hamás, que gobierna de facto el enclave, a pesar de que el presidente estadounidense, Joe Biden, le instó a una “desescalada significativa inmediata”.
A pesar de la presión internacional, el ejército israelí volvió hoy a bombardear múltiples objetivos del movimiento islamista Hamás en la Franja, desde donde siguió disparando cohetes hacia las comunidades israelíes vecinas, incluido un misil antitanque contra un autobús, alcanzando los 4.340 lanzamientos desde el inicio de la escalada.
La ofensiva de las tropas israelíes se ha centrado en los últimos días en los lugares de producción y almacenamiento de armas, los puntos desde los que los milicianos lanzan cohetes y la red de túneles -conocida como Metro- que supuestamente utiliza Hamás para trasladar combatientes y transportar armas de una zona a otra del enclave.