Los tres acusados de la caída de un teleférico en el norte de Italia el pasado 23 de mayo, que dejó catorce muertos, han sido puestos en libertad esta tarde de la cárcel, donde se encontraban como medida cautelar, tras responder a un interrogatorio, informan los medios locales.
El propietario de la empresa “Ferrovie del Mottarone“, que gestiona el teleférico, Luigi Nerini, así como el director de la infraestructura, Enrico Perocchio, han sido puestos en libertad, aunque siguen en la lista de investigados.
El director de operaciones del teleférico, Gabriele Tadini, ha sido puesto bajo arresto domiciliario, a pesar de admitir que desactivó el sistema de frenado, lo que provocó la caída.
La catástrofe se produjo el 23 de mayo, cuando la cabina del teleférico se precipitó al vacío entre la montaña alpina de Mottarone y la ciudad de Stresa (norte), matando a las 14 personas que había en su interior. Un niño quedó gravemente herido y huérfano.
Los tres responsables de la instalación siguen acusados de los delitos de homicidio doloso múltiple, catástrofe por negligencia y eliminación de herramientas para evitar accidentes laborales.
Sin embargo, el juez de Verbania, que investiga el caso, ha determinado que no existen riesgos que justifiquen la permanencia de estas personas en prisión mientras avanza la investigación de la Fiscalía, según informan los medios locales.
Su salida de prisión se produjo después de la medianoche, después de que los tres acusados fueran sometidos a interrogatorios durante toda la jornada del sábado.
Tadini, jefe de operaciones, ha admitido que desactivó una parte del sistema de frenado, según él, para acelerar el movimiento del teleférico, lo que provocó la rotura del cable y la caída de la cabina al vacío.