Un tribunal ruso ha desestimado hoy la demanda del líder opositor Alexei Navalny contra la prisión IK-3 de la región de Vladimir, a la que fue trasladado el pasado mes de abril para recibir tratamiento en el hospital de reclusos tras el deterioro de su salud.
El Tribunal Oktyabrosky de Vladimir, a unos 200 kilómetros de Moscú, no admitió a trámite la demanda de Navalny, que acusó a la administración penitenciaria de prohibir a sus abogados el uso de ordenadores portátiles y teléfonos inteligentes, incluso privados, en las reuniones con él entre abril y mayo.
El líder opositor ruso ya ha regresado a la prisión IK-2, también en la región de Vladimir, tras recuperarse de la huelga de hambre que abandonó el 23 de abril después de 24 días sin comer.
Navalni, de 45 años, cumple una condena de dos años y medio de prisión por incumplir las condiciones de su libertad condicional de un antiguo caso penal mientras se recupera en Alemania del envenenamiento que sufrió en agosto de 2020 en Siberia a manos, según él, del Servicio Federal de Seguridad (FSB).