México atraviesa por una fase de “meseta”, con un aumento en el número de casos de contagio de Covid-19, y es más pronunciado en cinco estados, entre ellos Quintana Roo y Yucatán, aseguró el subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell al término de las conferencias de prensa vespertinas para informar sobre la pandemia.
Antes de salir a celebrar con mariachis y un pastel que le llevaron un grupo de personas afuera de Palacio Nacional, el funcionario dijo que “en el caso de México no hemos llegado a una extinción de la epidemia, no hemos llegado a cero casos, cero eventos o cero contagios. La epidemia sigue activa”.
Al explicar lo que sucede en cuanto al nivel de intensidad del virus, comentó que “si comparáramos la ocurrencia de nuevos casos hoy, 11 de junio, con un momento anterior, estaríamos aproximadamente como estábamos entre la segunda y tercera semana de abril de 2020. Estamos como en el momento inicial de la epidemia”.
La diferencia, comentó, es que vamos a una “epidemia a la baja, pero es muy importante que no estemos declarando el fin de la epidemia, que tenemos conocimiento de varias entidades, cinco que tienen una actividad epidémica importante. Algunos casos como Yucatán y Quintana Roo la intensidad se compara con la que tuvieron en el momento más activo, en el verano de 2020. Quintana Roo lo ha superado y sigue con una tendencia al alza. No hay que confundir y no hay que especular que el mensaje del gobierno mexicano ha terminado”.
En esta ocasión no se presentaron actualizaciones sobre el avance de la epidemia en nuestro país, pero en los informes técnicos de la Secretaría de Salud se dio a conocer que hasta el momento han fallecido oficialmente 229 mil 821 personas.
En su última conferencia, el funcionario estuvo acompañado por Célida Dique Molina, directora de Prestaciones Médicas del IMSS, quien informó que el 15 de julio el centro de atención instalado en el Autódromo de la Ciudad de México también cerrará sus puertas, como lo hizo ayer el centro Citibanamex.
Aseguró que en el momento de mayor demanda, el IMSS contaba con 19 mil 999 camas en 232 hospitales para brindar atención. “Ningún mexicano se quedó sin atención, nunca nos faltaron camas”, agregó López-Gatell.
Gustavo Reyes, titular de la Comisión Coordinadora de Institutos Nacionales de Salud y Hospitales de Alta Especialidad, informó que en total, el Instituto Nacional de Salud para el Bienestar (Insabi) convirtió 460 hospitales y se adaptaron 11 mil camas. Además, se contrataron 6.000 médicos y 12.000 enfermeras.
López-Gatel reconoció que al inicio de la pandemia existía una capacidad “extremadamente limitada”, como consecuencia de casi 40 años de falta de inversión y desarrollo, y de la acelerada privatización del sistema nacional de salud, que provocó un déficit acumulado de más de 250.000 trabajadores.