WASHINGTON. El fin de la pandemia sigue siendo “un futuro lejano” para América Latina y el Caribe, dijo ayer la OPS, la oficina regional de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
América Latina y el Caribe representan el ocho por ciento de la población mundial, pero concentran casi un tercio de las muertes por Covid-19 desde que la OMS China informó de la aparición de la enfermedad en diciembre de 2019. Y representa más de una quinta parte de las infecciones mundiales.
“Este virus ha tocado todos los rincones del mundo y ha cambiado el curso de la historia”, dijo Carissa Etienne, directora de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), en una conferencia de prensa.
“Y aunque estamos viendo cierto alivio del virus en los países del hemisferio norte, para la mayoría de los países de nuestra región, el final sigue siendo un futuro lejano”, dijo.
La OPS dijo que las infecciones están disminuyendo en Estados Unidos y Canadá, aunque informó de aumentos en México, particularmente en los estados de Quintana Roo y Baja California y en Ciudad de México.
También señaló un aumento de nuevas infecciones por coronavirus en Belice, Panamá y Guatemala, así como en Cuba, República Dominicana y San Cristóbal y Nieves. Y dijo que la situación en Haití está empeorando.
En Sudamérica, duramente golpeada en los últimos meses por el virus, los casos siguen aumentando en Colombia, Brasil, Bolivia y Uruguay, y en Argentina, aunque ha habido una reducción, siguen teniendo una alta incidencia.
Etienne calificó el panorama de “preocupante” y destacó que, a pesar de ello, sólo una de cada diez personas en América Latina y el Caribe se ha vacunado completamente contra el Covid-19.
“Actualmente, muy pocos lugares se benefician de todo el potencial de protección de las vacunas, ya que existe una enorme brecha de acceso en nuestra región”, denunció.
“Esto es inaceptable, y la aparición de variantes hace aún más urgente acelerar el suministro a los lugares con mayor transmisión”, dijo.
Etienne también advirtió del riesgo de que aumenten los contagios de covid-19 en las Américas debido a las vacaciones de verano en el Norte, la temporada de huracanes y el impacto de la gripe en el invierno del Hemisferio Sur.
Mientras tanto, el FMI advirtió que la economía mundial se está recuperando de la pandemia a un ritmo desigual debido al acceso desigual a las vacunas, y la variante Delta amenaza a los países que carecen de suministros médicos esenciales,
Tras más de un año de pandemia, muchos países siguen luchando contra el virus, especialmente la variante Delta, cada vez más dominante y altamente infecciosa. Indonesia, Malasia, Tailandia y Australia se enfrentan a brotes de la pandemia y al endurecimiento de las restricciones.
“Estamos viendo un acceso muy desigual a las vacunas, incluidas las terapias y los diagnósticos (…), una recuperación divergente”, dijo la economista jefe del Fondo Monetario Internacional, Gita Gopinath.
Refiriéndose al aumento de casos en el África subsahariana y América Latina, Gopinath advirtió que hay países que no tendrán las pruebas, los equipos de protección personal o el oxígeno necesarios para “sobrevivir a este repunte”.
Según la OMS, los casos mundiales de Covid-19 aumentaron la semana pasada con respecto a la anterior, tras dos meses de descensos, a medida que la variante Delta del coronavirus se extiende a casi un centenar de naciones.