La Oficina en México del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ONU-DH) pidió al gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador que deje los discursos que estigmatizan a los defensores de derechos humanos y a los periodistas en México y que reconozca la labor de los comunicadores en el país.
Durante la audiencia pública realizada ayer en el marco del 180º periodo de sesiones de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), Guillermo Fernández-Maldonado, representante en México de la ONU-DH, llamó a terminar con la impunidad en las agresiones a comunicadores y defensores de derechos humanos.
“El gobierno debe garantizar que ningún funcionario siga utilizando un discurso que estigmatice a los periodistas y a los defensores de los derechos humanos”, dijo.
Por su parte, Esmeralda Arosamena de Triotiño, relatora de la CIDH para México, afirmó que los defensores de derechos humanos y los periodistas no deben ser vistos como enemigos del Estado, y ofreció ayudar a lograr un diálogo y poner fin a lo que llamó la confrontación entre los medios de comunicación y el gobierno de López Obrador.
Durante la audiencia, organizaciones no gubernamentales denunciaron la estigmatización de los periodistas por parte de López Obrador, y pidieron que el organismo, que forma parte de la Organización de Estados Americanos (OEA), asuma una posición firme y pida al Estado mexicano que desista de ese tipo de discurso, que no contribuye al clima de paz que se debe construir en México.
En su intervención, Leopoldo Maldonado, director de Artículo 19 en México, acusó al gobierno de AMLO de imponer, con su nueva sección en el matutino Quién es quién en la mentira, para lo cual nombró a un funcionario de comunicación social que calificará las notas periodísticas, un “tribunal de la verdad” para exhibir, estigmatizar y atacar a la prensa crítica o a quienes no se alinean con el gobierno federal.
“El problema no es que se cuestione a la prensa, sino que sea el jefe de Estado quien defina los estándares bajo los cuales la prensa miente o no, ya que afecta la libertad de expresión y el derecho a informar; además de manipular a la opinión pública al catalogar como mentira las críticas al gobierno”, afirmó Maldonado.
En defensa del Estado mexicano, el vocero de la Presidencia, Jesús Ramírez, respondió que la violencia y la presión sobre los periodistas sigue existiendo, pero no proviene del gobierno federal ni del Ejecutivo.
Pedro Vaca, Relator Especial para la Libertad de Expresión de la CIDH, preguntó si se seguían los estándares internacionales de verificación para el ejercicio del Quién es Quién y qué se preveía en caso de error al exponer a un medio o periodista. No recibió respuesta.