Este sábado, el propietario de la fábrica de alimentos cercana a Dhaka que se incendió el pasado 8 de julio dejando 52 muertos y 25 heridos, fue detenido junto con sus cuatro hijos, por la Policía de Bangladesh.
“Han sido detenidos en Dhaka y acusados de asesinato. De momento son los únicos acusados, si descubrimos que hay más personas implicadas también serán detenidas”, dijo a Efe el subinspector general de la Policía de Dhaka, Habibur Rahman.
No obstante, las autoridades siguen investigando las causas del incendio en la fábrica de Hashem Food and Beverages, en el distrito de Narayanganj, que se inició el jueves por la tarde cuando unos 250 trabajadores se encontraban en el interior del edificio de seis plantas.
Los bomberos declararon extinguido el incendio el viernes por la mañana, tras lo cual descubrieron 49 cadáveres, todos ellos en la tercera planta del edificio, donde la puerta estaba cerrada. Otras tres personas murieron en el hospital, mientras que 25 resultaron heridas.
El subdirector del cuerpo de bomberos, Debashis Bardhan, dijo a Efe que la operación de rescate continúa aunque no se han recuperado nuevos cuerpos hasta el momento.
Las autoridades del Colegio Universitario de Dhaka aseguraron a los medios de comunicación que 37 personas han dado muestras de ADN para identificar a los fallecidos, la mayoría de los cuales trabajaban en la fábrica y algunos eran menores de edad.
Es el caso de la desaparecida Champa Rani, de 14 años.
“Empezó a trabajar en la fábrica hace sólo siete días, su escuela estaba cerrada por el coronavirus y le permitimos trabajar para que ganara algo de experiencia”, dijo a Efe su hermano, Durjoy Barman, que acudió al hospital para tratar de identificar a Rani entre los fallecidos.
Zaher Ahmed, residente en Narayanganj, dijo a Efe que su esposa Firoza Begum sigue desaparecida desde el jueves.
“Ella trabajaba en una fábrica de ropa y hace sólo dos meses empezó en esta fábrica porque está más cerca de nuestra casa. Ahora ha desaparecido y no sé cómo consolar a nuestra única hija”, dijo Ahmed, entre lágrimas.
Los incendios y accidentes en las fábricas de Bangladesh son habituales.
En 2019, un enorme incendio en una planta química de la misma zona mató a 70 personas e hirió a 55.
Siete años antes, al menos 119 personas murieron en un incendio en una fábrica de ropa en el país asiático.