Lima, Perú – Pedro Castillo, un profesor de escuela rural que salió del anonimato para liderar una huelga de maestros, fue proclamado el lunes nuevo presidente electo de Perú, el primero sin parentesco con las élites políticas, económicas y culturales.
“No más pobres en un país rico”, repitió como mantra en esta campaña el abanderado de Perú Libre, un partido minoritario que se define como marxista-leninista, que derrotó por poco a Keiko Fujimori, hija del encarcelado ex presidente Alberto Fujimori (1990-2000).
Nació en Puña, un pueblo del distrito de Chota, en la región norteña de Cajamarca, donde es maestro rural desde hace 24 años. Es el tercero de nueve hermanos y sus padres son campesinos analfabetos. A sus 51 años, Castillo es “el primer presidente pobre de Perú”.
Casado con Lilia Padedes, tienen tres hijos: Arnol, de 16 años, Alondra, de seis, y Jennifer, de 23, que es adoptada.
“Nos sentimos orgullosos de que mi hermano haya llegado a esta altura, siendo un hombre humilde”, dijo a la AFP Amelia Castillo, la hermana menor del presidente electo, de 34 años.
Con un sombrero blanco de copa alta, típico de Cajamarca, recorrió Perú, incluso a caballo, para conseguir votos. De niña tenía que caminar varios kilómetros para ir a la escuela.
– “No somos chavistas”.
“Planeamos cambios, no parches ni reformas”, afirmó Castillo en campaña.
Su propuesta electoral se basó en una tríada: salud, educación y agricultura, los sectores prioritarios para impulsar el desarrollo nacional.
Prometió un millón de empleos en un año y niega que pretenda expropiar o confiscar los fondos de pensiones de los trabajadores, como afirman sus críticos.
También ha prometido convocar una Asamblea Constituyente para redactar en seis meses una nueva constitución que sustituya a la actual, que privilegia la economía de libre mercado.
La Constitución de 1993 es una herencia de Alberto Fujimori y su hija se opone a cambiarla.
Castillo también dijo que expulsará a los extranjeros que cometan delitos, en tácita alusión a los migrantes venezolanos que llegaron desde 2017 y superan el millón.
Para combatir la inseguridad propone retirar a Perú del Pacto de San José para restablecer la pena de muerte para los delincuentes.
Perú Libre es uno de los pocos partidos peruanos de izquierda que defiende el régimen del presidente venezolano Nicolás Maduro.
Sus primeras propuestas económicas inquietaron a multinacionales e inversores con sus promesas de nacionalizaciones y un papel más activo del Estado en el mercado, lo que le valió comparaciones con el “socialismo bolivariano” de Venezuela.
“No somos chavistas, no somos comunistas, nadie ha venido a desestabilizar este país, somos trabajadores, somos luchadores, somos empresarios”, dijo el maestro ante una multitud el 15 de junio en Lima.
Su principal asesor económico, Pedro Francke, aseguró a la AFP que los cambios que impulsan no tienen “nada que ver con la propuesta de Venezuela”.
“No vamos a hacer expropiaciones, no vamos a hacer nacionalizaciones, no vamos a hacer controles de precios generalizados, no vamos a hacer un control de cambio que haga que no se pueda comprar y vender dólares y sacar dólares del país”, dijo Francke.
|| Con información de EFE / AFP