El Gobierno español autorizó el martes la venta sin receta en farmacias de pruebas de autodiagnóstico del coronavirus para facilitar la identificación de los casos sospechosos y poder actuar con mayor rapidez ante el avance de la epidemia.
La decisión llega en un momento en el que el país vive la quinta oleada de contagios, que no deja de crecer desde hace varias semanas, alcanzando una media de 600 casos por cada 100.000 habitantes en 14 días, aunque más de la mitad de la población ya está totalmente vacunada.
En rueda de prensa, la ministra portavoz del Ejecutivo, Isabel Rodríguez, precisó que, en caso de resultado positivo, se debe contactar con los centros de salud para comunicarlo.
El objetivo es aumentar la tasa de diagnóstico del Sistema Nacional de Salud para detectar rápidamente los casos sospechosos e incluso los asintomáticos. Estos últimos son mayoritarios entre los infectados de entre 12 y 29 años, el grupo de edad más afectado por la infección en la actualidad.
La autorización para la venta de este tipo de pruebas fue objeto de polémica hace meses, cuando varias comunidades autónomas, entre ellas Madrid, solicitaron que los test de autodiagnóstico estuvieran disponibles en las farmacias, algo que el Ministerio de Sanidad descartó entonces.
Las autoridades pretenden que las pruebas, que se venderán sólo en farmacias, tengan un precio “asequible”, que en este caso será de entre 7 y 12 euros.
Portugal autorizó el 16 de abril la venta de pruebas de autodiagnóstico de anticuerpos contra el covirus tanto en farmacias como en establecimientos autorizados por un precio aproximado de siete euros.
También desde abril, los belgas pueden adquirir uno de estos productos en las farmacias por unos 8 euros, y quienes den positivo deben ponerse en contacto con su médico.
Asimismo, en Francia es posible adquirir desde abril los autotests antigénicos, que son por muestreo nasal y se obtienen en farmacias, según el dictamen favorable de la Haute Autorite de Sante (HAS) del 16 de marzo de 2021.
Por su parte, Austria comenzó a distribuir en marzo pruebas antigénicas gratuitas, cinco por persona y mes, para que la gente pueda también hacerse la prueba en casa.