Ken Salazar, quien fue nominado por el presidente Joe Biden para ser el próximo embajador de Estados Unidos en México, se comprometió ayer ante el Senado de Estados Unidos a proteger a las empresas energéticas estadounidenses de cualquier posible acción del gobierno mexicano en su perjuicio debido a la llamada reforma energética.
Al comparecer ante el Comité de Relaciones Exteriores para su confirmación, también prometió trabajar abiertamente con el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador en temas de seguridad y migración.
“El estado de derecho es importante. Obviamente es importante para nosotros en Estados Unidos y para los intereses aquí que están invirtiendo en México“, dijo Salazar después de que el senador de Texas, Ted Cruz, le dijera que el gobierno del presidente López Obrador había discriminado a las empresas estadounidenses y desestimara una carta que le enviaron varios legisladores expresando su preocupación al respecto.
“Estoy cada vez más preocupado por lo que parece ser una campaña deliberada y sistemática del gobierno mexicano para socavar a las empresas estadounidenses, y especialmente a las empresas involucradas en asuntos energéticos”, dijo el republicano Cruz.
“Es un tema complicado, pero prometo dar todo lo que tengo para ver cómo podemos trabajar con el gobierno mexicano que es soberano. Respeto su soberanía, pero trabajaremos juntos para ver si podemos encontrar alguna solución a este desafío”, respondió Salazar, quien fue secretario de Seguridad Nacional bajo el presidente Barack Obama.
“Lo que tenemos que hacer es plantear estos temas y asegurarnos de que estamos protegiendo la inversión estadounidense en México“, añadió.
Salazar reconoció que la relación México-Estados Unidos enfrenta grandes retos, pero advirtió que no se puede permitir que “se vaya al abismo”; por el contrario, consideró que es momento de lograr un cambio transformador.
Para ello, propuso aprovechar las oportunidades económicas a través del comercio, la infraestructura, el turismo y la inversión. Además, propuso proteger las fronteras compartidas y crear un entorno ordenado, seguro y humano para la migración.
“Reconozco lo difíciles y enormes que son los retos que tenemos por delante, pero también soy optimista sobre las oportunidades que tenemos por delante para nuestras dos naciones”, dijo.
Presidido por Bob Menéndez, senador demócrata por el estado de Nueva Jersey, el comité no planteó mayores problemas para la confirmación de Salazar, cuya votación podría tener lugar en los próximos días.
“Su tarea será muy grande en temas críticos como la migración, el comercio y otros temas desagradables como el tráfico de drogas, personas, armas, democracia, derechos humanos y temas laborales, pero creo que será un excelente embajador”, dijo Menéndez.