En su lucha por mantener su régimen, el gobierno de Daniel Ortega ha decidido detener a la candidata a la vicepresidencia de la oposición en Nicaragua, Berenice Quezada, por supuesta incitación a la violencia y al odio.
El martes por la noche, el partido Alianza Ciudadanos por la Libertad (CxL), representado por Quezada, informó que la ex reina de belleza de 2017 había sido informada por las autoridades judiciales, que llegaron acompañadas de policías, de que estaba bajo arresto domiciliario.
“Lo denunciamos hoy a las 9: 30 a.m., Berenice Quezada, candidata de la Alianza Ciudadanos por la Libertad a la Vicepresidencia de la República, fue notificada en su domicilio por las autoridades judiciales y del Ministerio Público, acompañada por la policía, que a partir de este momento se encuentra bajo arresto domiciliario, no tiene acceso a la comunicación telefónica, está sometido a restricciones migratorias y se le impide presentarse a cargos públicos en elecciones populares, y actualmente se encuentra bajo custodia policial en su domicilio”, publicó en Facebook el partido CxL, que también pidió la libertad del candidato opositor y el respeto a los derechos humanos.
Desde el inicio del proceso electoral en Nicaragua, 31 líderes de la oposición han sido detenidos, entre ellos siete candidatos presidenciales por presunta traición: Cristiana Chamorro, Arturo Cruz, Félix Maradiaga, Juan Sebastián Chamorro, Miguel Mora, Medardo Mairena y Noel Vidaurre.
Quezada, una modelo de 27 años, se inscribió el lunes en el CSE como compañera de fórmula del candidato presidencial de CxL y ex líder de la “Contra“, Oscar Sobalvarro.
A su salida de la sede del CSE, Quezada pidió la liberación de los “presos políticos” del gobierno.
“En Nicaragua las condiciones nunca han sido así, las condiciones las pone el pueblo que va a las urnas, como lo hizo en las calles, como lo hicimos (en las protestas) en 2018″, dijo.
“Tenemos que demostrar (en las elecciones) del 7 de noviembre que Nicaragua no los quiere en el país”, dijo, en alusión al gobierno que dirige Daniel Ortega desde 2007.
Ortega fue nominado por su partido el lunes para buscar una tercera reelección consecutiva en un proceso electoral que ha sido muy disputado dentro y fuera del país.
En 2018, Nicaragua se vio sacudida por masivas manifestaciones para exigir la renuncia del presidente, cuya represión dejó al menos 328 muertos y 2.000 heridos, según organizaciones humanitarias.
Por su parte, el gobierno confirmó 200 muertos, entre policías y simpatizantes sandinistas, según los informes.
El CSE tiene hasta el 9 de agosto para confirmar las candidaturas a presidente, vicepresidente y diputado presentadas el lunes por la alianza “Nicaragua Triunfante” del gobernante Frente Sandinista (FSLN, izquierda), la alianza opositora CxL y otros cinco partidos de derecha.
Con información de AFP
