El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, lamentó este lunes la “trágica” muerte del joven afroamericano Daunte Wright, abatido por la policía durante un control de tráfico, y pidió manifestaciones “pacíficas” tras una primera noche de tensiones.
“Lo que ocurrió” el domingo en Brooklyn Center, un suburbio de Minneapolis, “es verdaderamente trágico, pero creo que tenemos que esperar y ver lo que muestra la investigación”, dijo a los periodistas. “Mientras tanto, quiero dejarlo claro de nuevo: no hay absolutamente ninguna justificación, ninguna, para los saqueos”. Las manifestaciones pacíficas “son comprensibles”, añadió.
El agente que disparó el domingo a un joven negro en los suburbios de Minneapolis confundió su pistola eléctrica con su arma de fuego, dijo el lunes un comandante de la policía.
“El agente sacó su arma en lugar de la pistola eléctrica”, dijo Tim Gannon, comandante de la policía del municipio de Brooklyn Center, en una conferencia de prensa. “Fue una descarga accidental que resultó en la trágica muerte” de Daunte Wright.
La muerte de Wright provocó protestas en Minneapolis en un momento en que la ciudad ya está bajo tensión por el juicio de un expolicía por la muerte de George Floyd.
“No hay nada que pueda decir para disminuir el dolor de la familia de Wright“, dijo.
Gannon mostró a la prensa un vídeo de la cámara de control del coche en el que se ve cómo los agentes sacan al joven de su coche tras detenerlo por una infracción de tráfico.
Mientras Wright forcejea con la policía, una agente grita “taser, taser”.
Luego, uno de los agentes grita “Dios mío, le he disparado”, mientras el joven herido de muerte se aleja.
