La oposición venezolana anunció su participación en las elecciones regionales de alcaldes y gobernadores del país, previstas para el 21 de noviembre, en un comunicado enviado a medios y agencias locales.
Esto rompe con el boicot de tres años y pide la abstención por falta de requisitos de participación, según el documento.
“Anunciamos a la comunidad nacional e internacional nuestra participación en el proceso regional y municipal del 21 de noviembre de 2021, junto al tercer partido de la Mesa de la Unión Democrática (MUD), que aglutina a los principales partidos de la oposición en Venezuela.”
En 2018, la oposición venezolana tuvo que marginarse tras la reelección del presidente Nicolás Maduro, mientras que en 2020 perdió el poder en el Parlamento. En ambos casos, los resultados fueron tachados de fraude electoral.
“Sabemos que estas elecciones no serán ni justas ni convencionales. La dictadura ha puesto graves obstáculos en el camino del pueblo venezolano que ponen en peligro su deseo de cambio”, dice el texto.
El anuncio se produjo mientras el gobierno de Maduro y la oposición venezolana están inmersos en un proceso de negociación con México que incluye la elaboración de un calendario para las elecciones y el establecimiento de las condiciones necesarias.
“Sin embargo, tenemos claro que son un terreno de lucha útil para empoderar a los ciudadanos y promover la verdadera solución a la grave crisis de nuestro país: elecciones presidenciales y legislativas libres. Nos organizaremos, movilizaremos y fortaleceremos en unidad al servicio de la restauración democrática de Venezuela“, añadió la oposición en el comunicado.
El secretario general del partido Acción Democrática, Henry Ramos Allup, dijo que su lista de candidatos estaba “muy avanzada”.
Varios partidos de la oposición venezolana ya habían expresado su deseo de participar en las elecciones regionales, que serán organizadas por un Consejo Nacional Electoral (CNE) formado por representantes de la oposición y del gobierno de Madura, designados tras negociaciones internas.
La MUD se fundó en 2008 como una alianza opositora que reunía a una treintena de organizaciones. En 2012 se inscribió como partido para concurrir a las elecciones de 2015, en las que el “chavismo” perdió el poder en el Congreso por primera vez en 15 años.
Sin embargo, el poder judicial prohibió el uso de la tarjeta de la MUD hace tres años hasta que se restableció el 29 de junio.