Representantes de las Academias Nacionales de Ciencias, Ingeniería y Medicina de Estados Unidos expresaron su solidaridad con los 31 científicos del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) y pidieron al presidente Andrés Manuel López Obrador que cualquier proceso en su contra se sujete al derecho internacional de los derechos humanos.
“Compartimos la preocupación de muchos miembros de la comunidad científica internacional de que nuestros colegas científicos mexicanos están siendo objeto de acoso e intimidación”, dijeron Carlos del Río, John Hildebrand y James M. Tien, secretarios internacionales de las Academias de Medicina, Ciencias e Ingeniería, respectivamente, en una carta dirigida al presidente mexicano.
Según los académicos, lo más preocupante del caso es que “podría tener un efecto paralizante en la comunidad científica mexicana en general, así como posibles implicaciones negativas para la colaboración científica internacional”, por lo que instaron al Presidente a intervenir.
“Le instamos respetuosamente a que utilice sus buenos oficios para garantizar que cualquier otra acción de investigación en relación con las presuntas actividades de estos individuos se ajuste a los compromisos de México en virtud del derecho internacional de los derechos humanos.”
La carta se hace pública luego de que al menos tres de los 31 científicos confirmaron que enfrentan cargos de peculado, uso ilegal de atribuciones y facultades, uso de recursos de procedencia ilícita y delincuencia organizada, cargos por los que se busca que sean condenados hasta a 40 años de prisión.
En este sentido, los académicos estadounidenses aseguraron que “los reiterados intentos de arrestar y detener a estos individuos sin pruebas parecen incompatibles con la obligación internacional vinculante de México de defender el derecho al debido proceso”.
Según las Academias, este derecho está consagrado en el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos y en la Convención Americana de Derechos Humanos, de los que México es parte.