No hay una sola persona que, al escuchar su nombre, no sonría. Miguel Díaz García, más conocido como “El Mike“, fue un gran tipo; de esos quedan muy pocos.
Sin duda, se convirtió en un auténtico ejemplo de lo que verdaderamente trasciende la vida y la muerte, porque a casi nueve meses de su partida, las anécdotas, las bromas y el buen hacer siguen presentes entre sus compañeros reporteros, amigos y familiares, a través del incomparable aroma de un plato de birria, bien servido y caliente. Entre sus compañeros, era bien sabido que al pronunciar las palabras #ALB (A La Birria) con Mike, se auguraba un tiempo inolvidable, lleno de risas, camaradería y momentos que se convertirían en gratos recuerdos.
La pasión de Mike era cuidar de su familia, su mujer Mailee, su hija Mishelle y su hijo Ángel Miguel, a los que dio un ejemplo de integridad y humanidad. “Fue un gran marido y un excelente padre”, recuerda su mujer.
Después de ese amor, estaba el que sentía por su moto, una Harley que utilizaba para conducir y emprender largos viajes junto a sus compañeros del Club del que formaba parte.
Su calidad humana y profesionalismo estuvieron presentes en cada uno de los espacios de trabajo a los que se incorporó, como TV Azteca, Radio Universidad, Comunicación Social del Ayuntamiento de Aguascalientes y en la frecuencia 107.3 Más que Radio, donde trabajó hasta principios del año 2021.
El 28 de enero de este año, tras varios días de lucha contra el virus Covid-19, el “buen Mike” dejó este mundo. Sin embargo, entre los que le sobreviven, celebran su entusiasmo por la vida y su calidad humana. Mike era realmente un hombre sencillo, pero íntegro, íntegro y buen amigo.