SALAMANCA, Gto.- Este día de muertos será diferente para María, después de perder a su único hijo por Covid-19 hace apenas unos meses. Ella lo recuerda como un joven alegre y positivo que tenía todas las ganas de salir adelante.
Para María, la muerte de su hijo fue muy repentina, nunca imaginó que el Covid-19 lo consumiría tan rápido, sin embargo, guarda los mejores momentos, vivencias y anécdotas que le dejó Luis.
“Mi hijo era un gran protector de los animales, siempre buscaba su bienestar y luchaba por sus derechos.
En una ocasión su perro se salió de casa y se perdió, Luis pasó toda la noche buscándolo, no durmió hasta encontrar a su mascota, realmente amaba y cuidaba a los animales, no soportaba ningún tipo de maltrato hacia estos seres vivos que consideraba indefensos”, dijo su madre.
Por ello, este 2 de noviembre será un día completamente diferente para María, a diferencia de otros años, tendrá un significado más fuerte para ella, este año se está preparando con tiempo para elaborar el altar en honor a su hijo.
Planea elaborar un altar de muertos con los platillos favoritos de Luis como pozole, buñuelos, cacahuates envinagre, enchiladas, tacos al pastor, poner unos vasos y una gorra ya que eran los accesorios que más le gustaba usar cuando estaba vivo.
“No suelo celebrar estas fechas, para mí pasaron desapercibidas, pero tras la muerte de mi hijo, lo único que espero es poder sentir que está conmigo una vez más”, dijo.
María recordará a Luis como lo que era, un joven alegre, positivo, cariñoso, con ganas de conocer el mundo y de aprender cada día de las personas que le rodeaban, sin miedo a conseguir sus objetivos.
Cabe destacar que en Salamanca, el covid-19 se ha cobrado la vida de 682 salmantinos en un año y siete meses de pandemia y esto ha generado que para muchas familias, el próximo 2 de noviembre tenga un significado diferente.