NUEVA DELHI. La capital india ha ordenado el cierre de las escuelas hasta nuevo aviso ante la asfixiante contaminación del aire en la capital india. En los últimos años, la calidad del aire se ha deteriorado hasta alcanzar niveles peligrosos para la salud en el norte de la India y las zonas vecinas de Pakistán debido a la contaminación industrial y al humo de las quemas agrícolas.
En invierno, esta contaminación se convierte en nubes tóxicas que envuelven las ciudades, dificultando la visibilidad y haciendo que el aire sea inservible para respirar. El aire tóxico de Delhi, que ha permanecido en niveles “peligrosos” durante más de una semana, está provocando un aumento significativo del número de pacientes respiratorios en las salas de urgencias de los hospitales, una crisis a la que se han sumado este año los pacientes con coronavirus.
El smog, que forma una densa bruma gris en la ciudad de 20 millones de habitantes, está provocando un lento pero progresivo deterioro de la capacidad pulmonar, según los expertos.
La contaminación también ha provocado un aumento de las enfermedades respiratorias crónicas en los niños, y la exposición prolongada a contaminantes mortales podría afectar a su desarrollo cognitivo, según los expertos. La capital india, que está expuesta al fenómeno cada invierno, ordenó que el cierre de las escuelas impuesto hace unos días se prolongara sólo una semana hasta nuevo aviso.
La concentración de partículas en el aire ha alcanzado 30 veces el máximo recomendado por la Organización Mundial de la Salud. Para combatir la niebla tóxica, las autoridades han instalado cañones de agua en los lugares más críticos, que deben activarse tres veces al día.