Jóvenes Construyendo el Futuro, uno de los programas insignia de la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador, ahora busca incorporar a los mexicanos que son deportados de Estados Unidos y Canadá. En entrevista con El Sol de México, Sofía Orozco, directora de Educación del Instituto de Mexicanos en el Exterior (IME), explicó que el gobierno federal lanzó la iniciativa Construye tu futuro aquí. México te echa la mano.
Se trata de una extensión de Jóvenes Construyendo el Futuro que tiene como objetivo la reinserción social y productiva de los mexicanos de entre 18 y 29 años que, ante el reforzamiento de las medidas antiinmigrantes, principalmente en Estados Unidos, son retornados a nuestro país.
La iniciativa, a cargo de la Secretaría del Trabajo, la Secretaría de Relaciones Exteriores y el Instituto Nacional de Migración (INM), fue lanzada hace apenas dos semanas, pero se espera que para el 2022 se registren 40 mil jóvenes tras su regreso a nuestro país.
El pasado 5 de noviembre, este medio informó que el programa Jóvenes Construyendo el Futuro también implementa acciones en estados de la República Mexicana con altos niveles de violencia para atender a personas con antecedentes penales o que están en tratamiento por adicciones como una forma de reinsertarlos en la sociedad.
Los jóvenes deportados están ahora incluidos en los grupos objetivo del programa.
Orozco explicó que los repatriados que se inscriban recibirán una beca mensual de 4 mil 310 pesos hasta por 12 meses para capacitarse en unidades económicas donde puedan desarrollar o fortalecer los hábitos de trabajo y habilidades técnicas aprendidas en el extranjero y así aumentar su empleabilidad en el futuro. También recibirán atención médica por parte del IMSS.
El funcionario del IME señaló que el 40 por ciento de los mexicanos que son repatriados de Estados Unidos son jóvenes, por lo que es urgente atenderlos a su llegada para evitar que se conviertan en un problema para México. Sólo entre enero y septiembre pasado, un total de 168 mil 498 mexicanos fueron repatriados desde Estados Unidos y 224 desde Canadá, según cifras oficiales de la Unidad de Política Migratoria. “Creemos que como gobierno mexicano tenemos que atender a esta población porque si no logramos reintegrarlos a nivel social, laboral y económico, se convertirán en un problema para México, porque si no encuentran oportunidades, seguramente engrosarán las filas del rezago educativo o del crimen organizado”, advirtió Orozco.
Desde hace años, los call centers se han convertido en centros de recepción de mano de obra para miles de jóvenes mexicanos que por voluntad o por obligación regresan a México desde Estados Unidos y no encuentran aquí la oportunidad de seguir estudiando. Estos call centers se aprovechan de que los jóvenes, principalmente los que han vivido en Estados Unidos desde niños, dominan perfectamente el inglés y se ven obligados a trabajar hasta 12 horas diarias por un salario de entre seis y nueve mil pesos mensuales.
De acuerdo con Orozco, cada vez más jóvenes repatriados de Estados Unidos desarrollaron en ese país habilidades en áreas digitales y tecnológicas como la robótica, que podrían perfeccionarse en nuestro país. “También hemos identificado habilidades en los jóvenes repatriados en áreas de servicios, construcción, urbanización y gastronomía”, dijo.
Además, aseguró que existen las condiciones para construir su futuro aquí. México te da la mano se convierta en un espacio de oportunidades para los mexicanos.
“México se equivocaría si no aprovecha las capacidades educativas y laborales que tienen los mexicanos repatriados y que deben ser utilizadas en beneficio de sus propias comunidades”, dijo.
Según datos del gobierno federal, en Jóvenes Construyendo el Futuro participan 493 mil 279 aprendices: 290 mil 401 son mujeres y 202 mil 871 son hombres.
El programa no ha estado exento de críticas y observaciones formales como las realizadas por la Auditoría Superior de la Federación (ASF) en la revisión de la Cuenta Pública 2019, entre ellas, que durante su primer año de operación la Secretaría del Trabajo entregó apoyos económicos a beneficiarios fallecidos, servidores nacionales, empleados de gobierno, empleados de la iniciativa privada y estudiantes, cuando su población objetivo son jóvenes que no estudian ni trabajan.
A pesar de esto, el programa también comenzará a replicarse en Honduras con el apoyo económico de 30 millones de dólares de Estados Unidos. Además, el programa se extenderá a Guatemala y El Salvador como medida para reducir la migración irregular.