El ministro de Sanidad, Sajid Javid, anunció el sábado que las autoridades sanitarias británicas han detectado dos casos de personas con la variante Omicron del coronavirus en la localidad de Chelmsford, en el condado de Essex, cerca de Londres, y en la ciudad de Nottingham, en el centro de Inglaterra, que ya han sido puestos en cuarentena.
Javid anunció que otros cuatro países se añadirán a la lista de territorios cuyos residentes no podrán viajar al Reino Unido a partir de las 4 de la madrugada GMT del domingo (a menos que sean ciudadanos británicos que deban permanecer en cuarentena en un hotel designado), con lo que el total asciende a diez. El viernes, el gobierno añadió a Sudáfrica -donde se descubrió originalmente la nueva variante-, Namibia, Zimbabue, Botsuana, Lesoto y Eswatini a la lista roja, que ahora incluye a Angola, Mozambique, Malawi y Zambia. “La variante Omicron, que ha llevado a muchos países a suspender los vuelos al sur de África, es motivo de preocupación para la Organización Mundial de la Salud (OMS), ya que se han detectado unos 30 casos en sólo dos semanas, con casos confirmados no sólo en Sudáfrica, sino también en la vecina Botsuana, Hong Kong y Bélgica.