Durante la actual administración, los elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) han realizado 8 mil 915 detenciones en los 50 municipios más violentos del país, según datos obtenidos a través de transparencia.
Los municipios con más detenciones de militares son Tijuana, Baja California; Manzanillo, Colima; Hermosillo y Cajeme, Sonora; Acapulco, Guerrero; y León, Guanajuato, que en conjunto suman 4 mil 722 arrestos, es decir, 53 por ciento del total.
Además, estos seis municipios representan casi el 25 por ciento de las 19,458 personas detenidas en todo México por personal del ejército durante la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador.
Tijuana, Baja California, que aparece en primer lugar con mil 881, y según el “Ranking 2020 de las 50 ciudades más violentas del mundo” del Consejo Ciudadano para la Seguridad Pública y la Justicia Penal A.C., publicado en abril de 2021, es la segunda ciudad más violenta del mundo.
En segundo lugar está Manzanillo, Colima, con 689 detenciones, que además es una de las zonas más inseguras para las mujeres por el número de feminicidios registrados.
Hermosillo y Cajeme, en Sonora, también aparecen en tercer y cuarto lugar, con 652 y 573 detenciones, respectivamente.
Además, en los últimos años este estado se ha caracterizado no sólo por los homicidios, como el de Abel Murrieta Gutiérrez, candidato de Movimiento Ciudadano a la presidencia municipal de Cajeme, ocurrido en mayo de este año. A esto se suman los casos de personas desaparecidas y el hallazgo de fosas clandestinas.
Los otros dos municipios restantes son Acapulco, Guerrero, con 475, donde se han registrado asesinatos de personas a plena luz del día y en la playa. Y por último está León, Guanajuato, con 452, municipio que no sólo se caracteriza por la violencia, sino también por los ductos clandestinos para extraer huachicol.
Durante el actual sexenio, Guanajuato ha sido uno de los estados con más homicidios, varios relacionados con el huachicoleo, actividad ilícita comandada en el estado por el Cártel de Santa Rosa, cuyo líder José Antonio Yépez, alias “El Marro“, fue detenido por las fuerzas armadas en agosto de 2020.
En medio de la persecución desde una camioneta Jeep y un auto Mercury, los sujetos comenzaron a arrojar llantas metálicas en el camino para bloquear el paso de las unidades del ejército y la policía estatal, pero metros adelante les dieron alcance. Al revisarlos, se encontraron armas de fuego, droga y cartuchos y los nueve tripulantes fueron detenidos en Fresnillo, Zacatecas, en diciembre de 2020.
Zacatecas ha sido uno de los focos rojos de la violencia en las últimas semanas, al punto que el presidente Andrés Manuel López Obrador presentó el 24 de noviembre un Plan de Apoyo para el estado.
El plan contempla la llegada de 460 elementos del Ejército y la Guardia Nacional para reducir los índices delictivos en el estado.
Según los datos de detenciones, los municipios de Zacatecas no son los primeros en cuanto a arrestos. Por ejemplo, en Fresnillo sólo se reportan 77 capturas por parte de elementos del Ejército, mientras que en Guadalupe hubo 15 y en Zacatecas, la capital del estado, 22.
Según datos de las autoridades federales, hay un incremento de asesinatos en Fresnillo, Zamora, Cancún, Morelia, Uruapan, Tlaquepaque, Mexicali, Irapuato, Monterrey, Zapopan, Ecatepec, Jacona, Tlajomulco, Cuernavaca, Puebla, Apaseo el Grande, Playas de Rosarito, Chimalhuacán, Nezahualcóyotl, Cajeme, León y Acapulco, sólo en estas tres últimas las detenciones del ejército han sido prioritarias.
Por ejemplo, en Nezahualcóyotl y Ecatepec, Estado de México, sólo hay cinco y seis detenidos, respectivamente; Monterrey, Nuevo León, con 15; Apaseo el Grande, Guanajuato, con 24; Jacona y Morelia, Michoacán, con 43 y 60, respectivamente, y Cuernavaca, Morelos, con 61.
Para el gobierno federal, los 50 municipios más violentos son una prioridad en su estrategia de seguridad, según la secretaria de Seguridad Ciudadana, Rosa Icela Rodríguez, quien esta semana defendió las acciones de Cuatroté.
“Hemos decidido estar del lado correcto, del lado de los mexicanos, y pintar la línea contra la delincuencia. Tengan la certeza de que por mi parte y la de mi equipo cercano no hay ni habrá pactos abominables con el crimen organizado, ni actos fuera de la ley, y si algún servidor público traiciona este compromiso con la nación, desde ahora le digo que tendrá que enfrentar a la justicia, porque no vamos a encubrir a nadie”, dijo durante su comparecencia ante la Cámara de Diputados para el desglose del Tercer Informe de Gobierno.