El jueves, los 27 líderes de la Unión Europea (UE) advirtieron que la “agresión militar” contra Ucrania tendría “graves consecuencias y un alto precio” para Rusia.
“El Consejo Europeo reafirma su pleno apoyo a la soberanía e integridad territorial de Ucrania. Cualquier otra agresión contra Ucrania tendrá graves consecuencias y un alto coste”, dijeron los líderes en una declaración conjunta en una cumbre en Bruselas.
Las conclusiones se adoptaron por unanimidad tras varias horas de debate a puerta cerrada sobre posibles sanciones económicas.
Anteriormente, el Secretario General de la OTAN, Jens Stoltenberg, advirtió que “no pondremos en peligro el derecho de Ucrania a elegir su propio camino”.
“No pondremos en peligro el derecho de la OTAN a proteger y defender a todos sus aliados”, añadió tras una reunión con el Presidente ucraniano Volodymyr Zelenski en Bruselas.
Por su parte, Zelenski ha afirmado que “Rusia lleva empujando a Ucrania hacia la OTAN desde 2014, desde el inicio de la guerra, y hoy está allanando el difícil camino hacia el ingreso en la OTAN”.
Los países occidentales acusan a Rusia de preparar una nueva invasión de Ucrania y de desplegar un gran contingente en la frontera.
Rusia exige que la OTAN retire “formalmente” su decisión de 2008 de abrir la puerta a la adhesión de Ucrania y Georgia, lo que el Kremlin rechaza categóricamente.
El miércoles, Rusia entregó una lista de exigencias de seguridad a Karen Donfried, la subsecretaria de Estado estadounidense para Europa, que había viajado a Moscú.
Donfried llegó a Bruselas el jueves para presentar estas propuestas a la OTAN en una reunión con los embajadores de los Estados miembros, dijeron fuentes diplomáticas.
En la cumbre de la OTAN celebrada en Bucarest en 2008 se prometió la adhesión de Ucrania y Georgia, a pesar de las advertencias de Francia y Alemania. Sin embargo, la admisión de un nuevo miembro debe decidirse por unanimidad, recordó Stoltenberg.
El presidente ruso Vladimir Putin quiere un diálogo directo con Estados Unidos sobre el problema de Ucrania y exige garantías de seguridad como condición previa para rebajar las tensiones.
Tanto Estados Unidos como la UE han advertido que impondrán duras sanciones a Rusia si la invade.
“El agresor es Rusia“, dijo Stoltenberg. “Fue Rusia la que utilizó la fuerza militar contra Ucrania, se anexionó ilegalmente parte de Ucrania, Crimea, en 2014 y sigue desestabilizando el este de Ucrania“, dijo.
El gasoducto Nord Stream 2 entre Rusia y Alemania, recientemente finalizado pero aún no operativo, “es una pieza del rompecabezas”, dijo el jefe del Gobierno polaco, Mateusz Morawiecki.
El nuevo canciller alemán, Olaf Scholz, aún no se ha pronunciado sobre si el oleoducto se utilizará o no como palanca.
“Rusia no quiere volver al formato del Acuerdo de Normandía y negociar directamente con Estados Unidos“, admitió un diplomático europeo.
Esta constelación diplomática se alcanzó en una cumbre en Minsk en 2015 y fue aceptada por Putin, con Francia y Alemania desempeñando el papel de facilitadores en las negociaciones entre las dos partes enfrentadas.