El número de mujeres periodistas asesinadas o encarceladas está aumentando en todo el mundo. Así lo indica el informe anual de Reporteros sin Fronteras (RSF), que señala una mayor presencia de mujeres en la profesión, pero también que en algunos países son especialmente perseguidas por los regímenes dictatoriales.
Hay 60 mujeres periodistas encarceladas en prisiones de todo el mundo, el número más alto jamás registrado por RSF, de un total de 488 reporteros entre rejas, lo que representa el 12,3% del total.
Hace cuatro años, el número de mujeres periodistas encarceladas sólo representaba el 6,6% del total.
El número ha aumentado un tercio en comparación con el año anterior, mientras que los hombres han experimentado un incremento del 19%.
El año 2021 marcó un récord en el número de periodistas encarcelados, pero un mínimo histórico en el número de periodistas asesinados: 46, de los cuales solo cuatro eran mujeres, el 9%, el doble que el año anterior y el porcentaje más alto desde 2017. Según RSF, el número de asesinatos es el más bajo de los últimos 20 años.
Según la lista de la organización de defensa de la libertad de prensa, México es, por tercer año consecutivo, el país más peligroso para los periodistas, mientras que China sigue siendo el país donde más periodistas son detenidos.
RSF atribuye el descenso del número de periodistas asesinados a la “evolución de los conflictos regionales” en Siria, Irak o Yemen, con una “estabilización de los frentes” tras unos años especialmente mortíferos que marcaron un récord en 2016.
La cifra anual de muertos no había bajado de 50 desde 2003. Cayeron tanto los periodistas asesinados en zonas de conflicto como los atacados directamente por sus asesinos.
En total, 26 reporteros fueron objetivo de sus asesinos, el 65% del total, frente al 85% del año anterior, siendo México la principal zona de peligro con siete víctimas, lo que eleva el total a 47 en los últimos cinco años.