Ghislaine Maxwell, acusada como cómplice de Jeffrey Epstein en varios casos de pederastia, recibirá el veredicto del jurado en su caso hasta después de Navidad.
Este lunes tanto la defensa como la fiscalía dieron sus argumentos y desde ese día el caso quedó en manos del jurado, que en principio debería tener un veredicto antes del 24 de diciembre.
Sin embargo, tras 16 horas de debate durante dos días, el jurado de 12 miembros no logró llegar a un acuerdo sobre los seis cargos a los que se enfrenta Maxwell.
La jueza Alison Nathan, que lleva el caso, propuso una reunión para este jueves, pero se negaron, por lo que el veredicto se dará hasta el próximo lunes.
Es decir, durante los próximos cuatro días de descanso navideño, los doce miembros del jurado se comprometen a no hablar entre ellos, pero también a no tratar el tema juzgado con sus respectivos entornos, algo difícil de imaginar en las reuniones familiares o sociales que propician estas fechas.
Asimismo, no deben exponerse a informaciones escritas o televisadas, ni siquiera a las redes sociales, que puedan contaminar su opinión sobre el caso.
En los últimos dos días, los miembros del jurado han pedido ver de nuevo los testimonios de los cuatro principales testigos, aquellos que aseguran haber sido víctimas de abusos sexuales por parte de Epstein con la ayuda de Maxwell, y también han pedido tener acceso a los informes del FBI cuando los interrogó en su momento.
Para los especialistas que han seguido con detalle el juicio, esto parece indicar que el jurado se inclina por la tesis de la defensa -que en sus alegatos finales destacó las contradicciones entre las declaraciones de las víctimas al FBI y al tribunal-, algo que parece respaldar los gestos triunfalistas que intercambiaron ayer los abogados defensores.
En cualquier caso, Ghislaine Maxwell, de 59 años y en prisión preventiva desde el verano de 2020, puede ser condenada o absuelta por todos o sólo uno de los seis cargos que se le imputan, algunos de ellos relacionados con una sola de las víctimas, pero otros, como el cargo número cinco, es más grave porque incluye “conspirar en el tráfico sexual con personas menores de 18 años”, e implica a varias víctimas.