El gobierno de Estados Unidos está trasladando por vía aérea a solicitantes de asilo y migrantes, principalmente de Centroamérica, al sur de México, denunció la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR).
“Las personas o familias a bordo de estos vuelos que puedan tener necesidades urgentes de protección corren el riesgo de ser devueltas a los mismos peligros de los que han huido en sus países de origen en Centroamérica“, dijo en un comunicado Matthew Reynolds, representante de ACNUR para Estados Unidos y el Caribe.
Reynolds explicó que los vuelos se producen bajo el Título 42, una disposición puesta en marcha durante la administración del ex presidente Donald Trump al inicio de la pandemia de coronavirus, que permite a Estados Unidos expulsar rápidamente a los migrantes bajo argumentos de salud pública.
“El Título 42 impide a las personas y familias acceder a los procedimientos de asilo e identificar sus necesidades de protección en Estados Unidos“, dijo.
El funcionario dijo que esa expulsión aumenta el riesgo de “devoluciones en cadena”, es decir, retornos sucesivos por parte de diferentes países de personas vulnerables en situación de riesgo.
Agregó que la expulsión de migrantes por esta vía también pondrá a prueba la capacidad de respuesta humanitaria en el sur de México y el norte de Guatemala, además de que aumentará el riesgo de transmisión del covid-19.
“El ACNUR está dispuesto a apoyar a Estados Unidos, a México y a todos los países en las acciones y medidas que efectivamente salvaguarden la salud pública sin sacrificar el derecho fundamental de toda persona que huye de la guerra, la violencia o la persecución a tener acceso a un territorio seguro”, dijo.
Tras la llegada del demócrata Joe Biden a la presidencia de Estados Unidos, el número de migrantes que intentan cruzar ilegalmente desde México, muchos de ellos menores de edad, se ha multiplicado.
Para contener la migración ilegal, el gobierno mexicano ha desplegado 27.562 efectivos de las fuerzas armadas en sus fronteras sur y norte.