BERLÍN. El futuro canciller alemán, el socialdemócrata Olaf Scholz, anunció el primer gobierno post-Merkel con los Verdes y los Liberales, centrado en la recuperación de Covid-19 y el cambio climático.
Casi dos meses después de las elecciones al Bundestag, marcadas por un desplome histórico del bando conservador de la Canciller, Olaf Scholz se prepara para sucederla a principios de diciembre con una alianza sin precedentes con los Verdes y los liberales del FDP.
Los tres partidos han acordado un “acuerdo de coalición” titulado “Atrévete a avanzar”. Alianza por la Libertad, la Justicia y la Sostenibilidad” con importantes propuestas de política medioambiental como la eliminación progresiva del uso del carbón para 2030 en lugar de 2038.
Nunca antes una combinación política semejante había estado en el poder en Alemania después de la Segunda Guerra Mundial.
Las tres partes desafiaron las predicciones de que sus negociaciones durarían hasta 2022 o fracasarían,
Scholz “será un canciller fuerte”, dijo el líder del FDP, Christian Lindner.
El futuro jefe de gobierno, de 63 años, que aún debe ser investido por los miembros del Bundestag, prometió que haría todo lo posible para combatir la nueva ola de Covid 19 que azota el país, la peor desde el inicio de la pandemia.
Entre otras cosas, se destinarán 1.000 millones de euros para el personal sanitario “especialmente afectado” por la pandemia de Covid 19, dijo Scholz.
La formación de un gobierno en Alemania tranquilizará a los países europeos, ansiosos de que Alemania se quede sin gobierno en el momento en que la pandemia vuelva a estallar.
Otra de las medidas que la nueva coalición quiere poner en marcha según el acuerdo de gobierno es la legalización del cannabis, cuya venta en “tiendas autorizadas” estará reservada al consumo “de adultos”.
Mientras tanto, la Canciller asistió ayer a la que podría ser su última reunión del Consejo de Ministros, en la que varios miembros del gabinete, entre ellos Scholz, le hicieron regalos.
Por primera vez en 16 años, el SPD, que ganó las elecciones generales con el 25,7% de los votos, volverá a dirigir el gobierno de la mayor economía de Europa.