El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, arremetió este jueves contra el “bloque conservador” por estar en contra de su gobierno y aseguró que no podrán detener sus programas sociales dirigidos a los pobres.
Durante la presentación de su informe de gobierno por los tres años de su triunfo electoral, el mandatario dijo que la oposición no podrá detener ningún programa social ni grandes proyectos como el Tren Maya.
“Tampoco nada que vaya a los pobres, a quienes (los conservadores) odian porque, con algunas excepciones, los conservadores son clasistas, racistas e hipócritas”, dijo el Presidente.
Señaló que por el proceso de transformación que representa, en las pasadas elecciones intermedias del 6 de junio se integró “un bloque conservador” abiertamente opuesto al Gobierno.
“No hay duda de que ese bloque conservador se construyó para enfrentarnos y detener el proceso de transformación que está en marcha”, señaló.
Aseguró que a pesar de que empresarios, medios de comunicación, periodistas, líderes de la derecha, sociedad civil y políticos se unieron para evitar que su partido, Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), tuviera mayoría en la Cámara de Diputados, “no lograron su propósito”.
Sostuvo que la coalición de izquierda “Juntos Haremos Historia” triunfó en 186 de los 300 distritos “y si a ello se suman las curules plurinominales, nuestra bancada tendrá una cómoda mayoría” en el Congreso y por ello, dijo, el presupuesto destinado “al desarrollo del país y al bienestar de la gente” está asegurado.
Aunque no hizo referencia a la pérdida de la mayoría calificada, de dos terceras partes de la Cámara Baja, para reformar la Constitución.
Sin embargo, López Obrador dijo que sus opositores siempre recibirán de su Gobierno “el respeto y la libertad a la que tienen derecho de expresarse sin límites ni censura”.
También destacó que México logró consolidar el sistema democrático contra el fraude electoral y aseguró que “no se desató la violencia contra ciudadanos inocentes para infundir miedo”.