El embajador de Bolivia en México, José Crespo Fernández, confirmó que el próximo año Industrias Quantum Motors producirá en México su modelo de automóvil eléctrico E-2.
En entrevista con El Sol de México, Crespo Fernández explicó que Industrias Quantum Motors es la primera empresa boliviana dedicada a la fabricación de autos eléctricos con baterías de litio, y que en 2022 compartirá su tecnología para comenzar a producir su modelo E-2 en nuestro país. Esto es parte del acercamiento entre Bolivia y México para que el país asesore al gobierno mexicano en la explotación del litio.
El embajador Crespo Fernández aseguró que la cooperación entre México y Bolivia avanza de acuerdo con la declaración firmada por ambos países en marzo pasado, que incluye el impulso de proyectos conjuntos en sectores como el del litio.
“Esto va más allá de las buenas intenciones, ya se han realizado las primeras reuniones oficiales y seguirá habiendo más para ver hasta dónde podemos ver este tema”, dijo el embajador.
El diplomático indicó que en una segunda etapa, su país espera que una delegación calificada de México visite el Salar Uyunie, ubicado en el sur de Bolivia, para conocer de primera mano el trabajo que su país ha realizado para producir a escala industrial más de 50 mil toneladas de carbonato de litio al año.
En septiembre pasado, el presidente Andrés Manuel López Obrador presentó al Poder Legislativo su Reforma Eléctrica, que incluye la nacionalización del litio, aunque en la iniciativa se especifica que se respetarán las ocho concesiones ya otorgadas siempre y cuando ya estén en proceso de exploración y se vaya a iniciar el proceso de explotación.
“A la fecha tenemos reportes de que sólo uno de esos ocho concesionarios cumple con esas características, pero, sin embargo, si logran acreditar estas ocho, la concesión estará vigente”, dijo el secretario de Gobernación, Adán Augusto López Hernández, en la conferencia matutina del 1 de octubre. Esta concesión pertenece a Gangfeng Lithium, el mayor productor de baterías de China, que junto con Bacanora Minerals explotará el yacimiento ubicado en Bacadéhuachi, Sonora.
Este diario publicó en septiembre que la Secretaría de Economía (SE) invertirá 55.2 millones de pesos entre este año y el próximo para localizar yacimientos de litio en 82 localidades del país.
Dichas localidades están en Oaxaca, Puebla, Zacatecas, Durango, Guanajuato, Michoacán, Jalisco, San Luis Potosí, Sonora, Chiapas, Tamaulipas, Nuevo León, Coahuila, Chihuahua, Hidalgo, Veracruz, Sinaloa y Morelos.
La producción de recursos naturales estratégicos debe contribuir al desarrollo de los países y no exclusivamente a los intereses de empresas privadas nacionales o extranjeras, consideró el embajador boliviano en México. “No es sólo una cuestión de México o Bolivia, creo que todos los países latinoamericanos, incluso los más pobres, deberían hacerlo (la nacionalización de los hidrocarburos) como algo lógico… Considero que la producción de recursos naturales en América Latina debe ser pensada siempre que si son estratégicos, pueden contribuir al desarrollo de los países y no exclusivamente a intereses privados”, dijo el embajador en entrevista con este medio.
Según el diplomático, la primera manifestación nacionalista en América Latina fue precisamente en México con el movimiento revolucionario de 1910, que se fortaleció con la expropiación petrolera durante el gobierno de Lázaro Cárdenas. “Los países latinoamericanos han copiado esa lógica de México y no al revés”, dijo.
Respecto a la relación entre la nación sudamericana y México, Crespo Fernández dijo que atraviesa por uno de los mejores momentos. “Estamos en uno de los mejores momentos de la relación bilateral, porque a lo largo de la historia hemos tenido varios momentos mejores”, destacó el diplomático a dos años de que el derrocamiento del presidente Evo Morales pusiera la relación entre ambos países al borde de la ruptura y mantuviera al diplomático como asilado político en un año.
Destacó que su país ha sido partícipe de todos los esfuerzos de México para poner en práctica el funcionamiento real de la Comunidad de Estados Latinoamericanos (CELAC), con medidas que tienen que ver no sólo con Bolivia, sino a nivel regional con el tratamiento de lo que ha sido y será la región después de la pandemia.