El proceso electoral de 2021 tiene una cifra histórica en la participación de las mujeres como candidatas, luego de que la reforma de 2014 en la materia obligó a los partidos políticos a reservar el 50 por ciento de los espacios para ellas. De 69 mil 687 candidatos que buscan ser elegidos el próximo 6 de junio, el 51.5 por ciento son mujeres.
Sin embargo, las candidaturas a gubernaturas y presidencias municipales siguen siendo mayoritariamente para hombres. Aunque la brecha de género se ha reducido para estos cargos, los partidos políticos siguen postulando a hombres para los puestos más importantes.
Para las 15 gubernaturas que se renovarán este año, hay 133 candidaturas registradas, de las cuales 76 son de hombres y 57 de mujeres, sólo el 42.8 por ciento.
Hasta mediados de abril, en un promedio de varias encuestas monitoreadas por el INE, se espera que cuatro estados tengan una gobernadora: Baja California, Chihuahua, Colima y Tlaxcala. La cifra podría llegar a cinco debido a la sustitución en Guerrero de Félix Salgado Macedonio por su hija, Evelyn Salgado, ya que en ese estado, Morena lleva la delantera en la intención de voto para gobernador.
Ya desde la última elección federal de 2018, las mujeres ganaron presencia en 23 de los 27 congresos que se eligieron ese año al pasar del 41.3 por ciento al 48.2. En esa elección, nueve legislaturas tuvieron mayoría de diputadas: Tlaxcala, Oaxaca, Chiapas, Querétaro, Baja California Sur, Chihuahua, Tabasco y Zacatecas.
En 2021 se renovará la Cámara de Diputados federal y 30 congresos locales. En el primer caso, 55.3 por ciento de las 2 mil 173 candidaturas de mayoría relativa son para mujeres, pero en el caso de representación proporcional, de donde normalmente provienen los líderes de las bancadas y presidentes de las comisiones, sólo 50.4 por ciento de mil 282 candidaturas fueron para este grupo.
Para las presidencias municipales, aunque la brecha de género es mínima, el número de candidaturas sigue siendo a favor de los hombres, es decir, 4,260 contra 4,171 candidatas (49.4 por ciento).
Según un estudio de ONU Mujeres, entre 2000 y 2010, el número de ayuntamientos presididos por mujeres pasó del 3,5 al 5,2 por ciento, mientras que de 2015 a 2019, esta proporción alcanzó el 22,8 por ciento debido a las reformas electorales que obligan a la paridad de género en las candidaturas municipales.
En el caso de los ayuntamientos y regidurías, la proporción de candidatos y candidatas es a favor de las segundas.
Tres mil 447 mujeres compiten por la regiduría, 50.7 por ciento de los seis mil 709 candidatos, mientras que 21 mil 633 de los 41 mil 796 candidatos son mujeres (51.7 por ciento).
LA PARIDAD NO HA SERVIDO DE NADA
Arussi Unda, vocera del colectivo Brujas del Mar, se muestra escéptica sobre la mayor participación política de las mujeres, pues el hecho de que haya un mayor número de electas no garantiza que lleven la agenda feminista.
“Que haya mujeres en puestos de poder no significa necesariamente poder para las mujeres. Estamos viendo el gobierno con mayor paridad, pero también con mayores retrocesos en iniciativas o instituciones, derechos y programas de protección para las mujeres”, dijo la activista.
También acusó que hay casos de candidatas que están defendiendo los intereses de los hombres “como es el caso de la hija de Salgado Macedonio”.
“Es súper complicado. En mi opinión no asegura nada. Personalmente, no me da esperanzas de nada. No descarto que haya mujeres valiosas que estén participando en política, pero hay que señalar que todavía estamos en un espejismo”, dijo.
Aseguró que las sociedades más justas y las que tienen más orden son las que tienen una representación digna de las mujeres y son las que protegen a las mujeres y a los niños, sin embargo, para la activista, la agenda feminista no ha estado presente en las mujeres que llegan al poder en México.
“Definitivamente la agenda feminista no ha estado en la mesa. Vemos, por ejemplo, a una mujer en un cargo muy alto como Olga Sánchez Cordero diciendo que el tema de la despenalización del aborto no será un tema o no se discutirá a nivel federal. Entonces de qué sirve si no está representando, si no está llevando la agenda a su cargo”, acusó.
Para Arussi Unda el principal problema de las mujeres que deben atender las diferentes autoridades es la creciente violencia de género, que según ella “está desbordada.”
“No podemos seguir viviendo así. Definitivamente hay que poner mano dura en ese tema y ponerlo como uno de los asuntos prioritarios en la agenda del gobierno. Esto ya no se puede posponer, ya no se puede ignorar…. Reparación del daño a las víctimas de feminicidio y desaparición forzada, ver qué pasa con los huérfanos del feminicidio”, urgió.
Acusó que es complicado porque los partidos están poniendo candidatos