DASHINGTON. Las personas vacunadas contra el covid-19 en zonas de alto riesgo en Estados Unidos deben volver a usar mascarillas, dijo el máximo responsable de salud, un cambio importante que subraya la lucha del país para suprimir la variante Delta.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, dijo que este anuncio demuestra que el país debe “mejorar” sus tasas de vacunación y añadió que está “considerando” la posibilidad de imponer la inmunización obligatoria a los dos millones de empleados federales del país.
Rochelle Walensky, directora de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), dijo en una rueda de prensa telefónica que los nuevos datos muestran que, aunque las vacunas son eficaces contra la variante Delta, en los casos inusuales en los que hay contagio entre las personas inmunizadas, hay un mayor riesgo de transmisión.
Por este motivo, “en las zonas en las que hay una transmisión importante y elevada, los CDC recomiendan que las personas totalmente vacunadas lleven mascarilla en los lugares públicos cerrados”, dijo.
Según los datos más recientes de los CDC, gran parte del sur de Estados Unidos experimenta una transmisión elevada, mientras que las zonas con altas tasas de vacunación del noreste de Estados Unidos presentan una transmisión comunitaria moderada.
Se considera que la transmisión sustancial está entre 50 y 100 casos por cada 100.000 personas al día durante una media de siete días, mientras que la transmisión alta implica más de 100 casos por cada 100.000 personas durante la misma media.
En Francia, cualquier trabajador que no se haya vacunado puede ser despedido, indicó el Ministerio de Trabajo, tras una votación en el Parlamento sobre la ampliación del documento que certifica la vacunación o un test negativo (“pase sanitario”).
El domingo, los diputados franceses aprobaron la vacunación obligatoria para determinadas profesiones y la ampliación del “pase sanitario”, un día después de que se volvieran a celebrar manifestaciones contra estas medidas.
El texto prevé la obligación de presentar el “pase sanitario” (prueba negativa de covid-19, prueba de vacunación o certificado de haber superado la enfermedad) en la mayoría de los establecimientos públicos (cafeterías, cines, trenes, aviones…). La medida afecta también a los trabajadores de estos lugares y debería entrar en vigor a principios de agosto.
Mientras tanto, en Arabia Saudí se anunció que los ciudadanos que viajen a un destino de la lista roja de naciones afectadas por la pandemia no podrán salir del país durante tres años.
Tras más de un año de prohibición total, el gobierno saudí autorizó recientemente a su población a viajar al extranjero, pero al mismo tiempo incluyó a varios países de Asia, África y Oriente Medio en una lista roja de destinos prohibidos.
La decisión se tomó “ante la propagación de una nueva variante” del Covid-19, explicó el ministerio.