El presidente Andrés Manuel López Obrador restó importancia a las críticas desatadas por la asistencia de los presidentes de Venezuela, Nicolás Maduro, y de Cuba, Miguel Díaz-Canel, a la reunión de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) el pasado fin de semana y destacó que el encuentro fue muy positivo “a pesar de las diferencias”, al tiempo que dijo que aunque hubo confrontación, “esto es consustancial a la democracia”.
La presencia de Díaz-Canel y Maduro este fin de semana en la plenaria de la CELAC, donde México fue el anfitrión, generó severas críticas contra el presidente López Obrador por parte de congresistas estadounidenses, como Michael congresistas, como el texano Michael McCaul y la floridana María Elvira Salazar, e incluso durante la propia sesión plenaria hubo severos enfrentamientos entre presidentes, como fue el caso del presidente de Uruguay, Luis Lacalle Pou, y de Paraguay, Mario Abdo Benítez, quienes se enfrentaron a Nicolás Maduro y no reconocieron al gobierno venezolano.
Estados Unidos y otras naciones acusan a Maduro de mantener un gobierno dictatorial y de colaborar con grupos criminales; mientras que al presidente de Cuba se le acusa de reprimir a su pueblo, tras las protestas de julio pasado en la isla, cuando miles de ciudadanos salieron a protestar contra el régimen castrista.
El presidente López Obrador propuso en el pleno, en defensa de Maduro y Díaz-Canel, un llamado a terminar con la “política de bloqueos y maltratos”.
Sin embargo, este lunes, el presidente mexicano evitó la polémica respecto a esta postura, e informó que lo importante de la reunión en Palacio Nacional del sábado pasado fue que se pudieron lograr acuerdos, principalmente en temas como: salud, para que no falten vacunas en América Latina y el Caribe y para crear un fondo de ayuda a los países de la región que sean afectados por desastres naturales.
También mencionó que en la carta que envió al presidente de Estados Unidos, Joe Biden, le pidió actuar con mayor urgencia para invertir en Centroamérica y frenar la migración.
En esta carta, el presidente López Obrador pidió a su homólogo estadounidense que invierta en los programas desarrollados por México, como Sembrando Vida y Jóvenes Construyendo el Futuro, en los países de Guatemala, Honduras y El Salvador, como una medida para detener la migración.