El Gobierno británico elevó este lunes el nivel de alerta terrorista en el Reino Unido de “sustancial a grave”, lo que implica que la posibilidad de un atentado es “altamente probable”, tras la explosión de un vehículo frente a un hospital de Liverpool que dejó un muerto y un herido ayer domingo.
En declaraciones a los medios de comunicación, la ministra del Interior británica, Priti Patel, dijo que el atentado de ayer tras la explosión de un taxi ha tenido un impacto significativo en la comunidad de Liverpool: “Como gobierno, y como ministra del Interior, seguimos trabajando con todos cuando se trata de la seguridad del país y nos aseguraremos de tomar todas las medidas necesarias que se requieran”.
La policía británica describió el lunes la explosión como un “incidente terrorista” y anunció la detención de un cuarto hombre de 20 años. La detención de tres hombres, de 29, 26 y 21 años, había sido comunicada previamente en virtud de la “ley antiterrorista” en la zona de Kensington.
Russ Jackson, jefe de la policía antiterrorista en el noroeste de Inglaterra, dijo que aún se desconocen los motivos del ataque, pero instó a la población a “mantener la calma pero estar alerta”.
Según medios locales que citan a investigadores y amigos del taxista, otra versión es que el pasajero quería ir primero a la catedral, pero como algunas calles estaban cerradas, el conductor tuvo que pasar por delante del hospital.
“No podemos establecer una conexión en este momento, pero es una línea de investigación que estamos explorando”, dijo Jackson en la rueda de prensa del lunes.
También especificó que los investigadores creen tener la identidad del pasajero, pero prefieren no revelarla en este momento.
Los investigadores creen que el artefacto explosivo fue fabricado por el pasajero, que lo llevó al vehículo y murió tras detonarlo. El pasajero tomó el taxi en la avenida Rutland de Liverpool y pidió ir al hospital de mujeres, a 10 minutos de distancia.
La policía registró una vivienda en esa misma avenida, donde “se encontraron artículos significativos y se requerirán más investigaciones hoy y potencialmente en los próximos días”.
Algunos tabloides y responsables políticos calificaron de “héroe” al taxista, que resultó herido en la explosión, ya que su acción permitió que no murieran más personas. Según la policía, ya ha salido del hospital donde estaba siendo atendido.
“El caso está todavía bajo investigación, así que no puedo comentar los detalles ni decir exactamente qué tipo de incidente fue (…) pero parece que el taxista en cuestión se comportó con un temple y una valentía increíbles”, dijo el lunes el primer ministro británico, Boris Johnson, durante una visita a un centro médico de Londres.
Según el Daily Mail, el conductor se dio cuenta de que el pasajero era sospechoso y lo encerró en el taxi antes de escapar.
“El taxista, con sus heroicos esfuerzos, consiguió evitar lo que podría haber sido una horrible catástrofe en el hospital”, dijo el lunes en la BBC la alcaldesa de Liverpool, Joanne Anderson.
Se espera que la alcaldesa presida una reunión del comité de crisis del Gobierno sobre este asunto a última hora de la tarde del lunes, según informó Downing Street.
La explosión se produjo poco antes de las 11 de la mañana de ayer, durante las conmemoraciones de las víctimas de la guerra, denominadas “Remembrance Sunday” en el Reino Unido. A unos cientos de metros, soldados, veteranos y miembros del público se reunían para un homenaje en la catedral de Liverpool.
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