El Secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, exigió el domingo la liberación inmediata del periodista bielorruso de la oposición Raman Protasevic y condenó “rotundamente” el desvío forzoso a Minsk del avión que lo transportaba a Lituania.
Blinken dijo en un comunicado que el gobierno de Estados Unidos está coordinando estrechamente este asunto con sus aliados, incluidos funcionarios de la Unión Europea (UE), Grecia y Lituania.
Las autoridades bielorrusas detuvieron el domingo al periodista, crítico con el gobierno del presidente Alexadr Lukashenko, después de que ordenara desviar al aeropuerto de Minsk el vuelo de Ryanair en el que Protasevic viajaba de Atenas a Vilna.
La tripulación del vuelo FR4978 de Ryanair “fue notificada por el servicio de control de tráfico aéreo bielorruso de una posible amenaza a la seguridad a bordo y recibió instrucciones de desviar (el avión) al aeropuerto más cercano, el de Minsk“, dijo la aerolínea en un comunicado publicado en Twitter.
Blinken señaló que ante los indicios de que el aterrizaje forzoso se basó en falsedades, Washington apoya que el Consejo de la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI) se reúna lo antes posible para abordar este suceso.
“Este impactante acto perpetrado por el régimen de Lukashenko puso en peligro la vida de más de 120 pasajeros, entre ellos ciudadanos estadounidenses”, subrayó el jefe de la diplomacia estadounidense.
Blinken también expresó su “profunda” preocupación por las informaciones que apuntan a que los servicios de seguridad y los aviones militares bielorrusos participaron en la escolta del avión que transportaba a Protasevic.
El ministro de Asuntos Exteriores estadounidense recordó que los medios de comunicación independientes son un pilar esencial de la aplicación de la ley y un componente vital de una sociedad democrática.
“Estados Unidos condena de nuevo el continuo acoso y la detención arbitraria de periodistas por parte del régimen de Lukashenko“, dijo Blinken, que apoyó las aspiraciones de los bielorrusos a un futuro “libre, democrático y próspero” y sus peticiones de que su gobierno respete los derechos humanos y las libertades fundamentales.
Protasevich, cuyo medio de comunicación fue la principal fuente de información durante las primeras semanas de protestas antigubernamentales tras las fraudulentas elecciones presidenciales de agosto de 2020, vivía exiliado en Lituania.
El periodista fue uno de los fundadores de los canales de Telegram con sede en Polonia Nexta y Nexta Live, con más de 1,2 millones de seguidores.
Nexta fue reconocido como “extremista” en octubre del año pasado en Bielorrusia y sus dos fundadores fueron acusados de organizar disturbios e incitar al odio social.
El KGB bielorruso también los incluyó en una lista de personas implicadas en el “terrorismo”, delitos por los que pueden ser condenados a 15 años de prisión o incluso a la pena de muerte, según la oposición.