Estados Unidos está “profundamente preocupado por la violencia en las calles de Israel“, donde los enfrentamientos entre judíos y árabes acompañan el nuevo conflicto entre Hamás y el Estado hebreo, dijo el jueves el secretario de Estado Antony Blinken.
Judíos y palestinos “merecen participar sin miedo a la violencia en las próximas celebraciones” relacionadas con el fin del Ramadán para los musulmanes y la fiesta judía de Shavuot, dijo Blinken a los periodistas.
El secretario de Estado volvió a pedir el fin de los ataques con cohetes del movimiento islamista palestino Hamás en territorio israelí y defendió el derecho de Israel a defenderse, como ha hecho Estados Unidos en varias ocasiones desde el inicio de esta nueva conflagración.
“También estamos hablando con nuestros socios regionales para que prevalezca la calma”, añadió Blinken, después de que Washington haya intensificado los contactos con países árabes como Egipto y Qatar para presionar a Hamás.
El jefe de la diplomacia dijo que Estados Unidos es partidario de celebrar una reunión de emergencia del Consejo de Seguridad de la ONU “a principios de la próxima semana” para abordar el estallido de violencia entre israelíes y palestinos.
“Espero que esto dé a la diplomacia algo de tiempo para obtener resultados y ver si conseguimos una desescalada real”, dijo Blinken, que la víspera envió un emisario a Israel y a los Territorios Palestinos.
Fuentes diplomáticas dijeron el jueves que Washington había bloqueado una reunión de emergencia sobre los enfrentamientos que varios miembros del Consejo de Seguridad querían celebrar el viernes.