<p>”El primer supermercado del mundo diseñado por artistas” abrió sus puertas el miércoles en Londres, por iniciativa del Museo del Diseño, que transformó su tienda de regalos para poder recibir visitantes a pesar de las restricciones impuestas por el coronavirus.
Confinada contra la pandemia desde enero, Inglaterra comenzó hace unas semanas a levantar algunas restricciones. Pero mientras los gimnasios, las peluquerías y las terrazas de bares y restaurantes pudieron reabrir la semana pasada, los museos y otros lugares de ocio tendrán que esperar hasta el 17 de mayo.
Pero en el oeste de Londres, el Museo del Diseño encontró una forma de sortear la prohibición: convertir su tienda en un supermercado de productos de primera necesidad.
Los productos, que van desde el arroz hasta el café o las cremas cosméticas, se presentan en envases diseñados por diez artistas. Los tarros y latas de colores vivos están perfectamente alineados en las estanterías, también diseñadas.
El dinero recaudado en esta particular exposición, abierta desde este miércoles hasta el domingo y en la que todo está a la venta, se destinará a un fondo de ayuda a artistas y diseñadores.
Aunque las tiendas no esenciales pudieron reabrir el 12 de abril, el director del Museo del Diseño, Tim Marlow, destaca que la exposición permite cuestionar lo que se considera esencial en la vida cotidiana.
“¿No es esencial la creatividad?”, se pregunta, y dice estar “desconcertado por el hecho de que tiendas, gimnasios y peluquerías hayan podido reabrir y los museos tengan que esperar hasta el 17 de mayo”.
Para apoyar la cultura a pesar de la pandemia, Marlow aboga por visitar esta “tienda que es realmente una obra de arte” y defiende una “experiencia completamente diferente” que tiene “un elemento de diversión, un elemento crítico y un aspecto cultural serio”.
“Aquí se pueden comprar alimentos esenciales a precios competitivos”, explica Marlow a la AFP. “Se trata de quién se beneficia, de quién financia, y de hablar de cultura”.
Debido a los sucesivos confinamientos impuestos en el Reino Unido por la pandemia, el Museo del Diseño ha perdido el 92% de sus ingresos, pero hasta ahora se ha mantenido a flote gracias a una subvención gubernamental de 3 millones de libras (4,1 millones de dólares o 3,4 millones de euros).
En opinión de Marlow, que ha montado este proyecto en dos meses, el sector cultural tendrá un importante papel que desempeñar en el mundo post-pandémico.
“Quiero afirmar la relevancia de los museos. Nuestra misión es investigar y presentar soluciones a los problemas a los que nos enfrentaremos después de la pandemia”.
“Los presupuestos son ajustados en la industria creativa, pero la creatividad está en todas partes”, dice Camille Walala, una de las diseñadoras de la exposición, que alaba esta “nueva plataforma para que los artistas muestren su trabajo”.
Vestida con ropa colorida y grandes joyas amarillas, rojas y azules, esta artista londinense, cuyo lema es “tomarse la alegría en serio”, marca claramente el tono de esta exposición.
“La gente debería venir porque es emocionante salir de casa, ver arte y sentirse inspirado, es una exposición de júbilo”, alega.
También permite “incorporar el arte a los productos cotidianos: la gente los comprará y los conservará como una obra de arte asequible”, dice, y considera que es “una forma muy bonita de presentar el arte”.
Peter Williamson, de 64 años, está de acuerdo. “Paso por delante todos los días y me quedé intrigado cuando montaron la falsa tienda”, dice, admitiendo que le “encanta la instalación de los carros de la compra”.