La Procuraduría de Estados Unidos solicitó que los jurados que participen en el juicio por narcotráfico que se llevará a cabo el próximo año contra el ex secretario de Seguridad de México, Genaro García Luna, permanezcan en el anonimato y sean escoltados por alguaciles, para evitar que sean intimidados.
“El acusado tiene los recursos financieros para intimidar o incluso dañar al jurado”, dijo Breon Peace, fiscal de la Corte del Distrito Este de Nueva York, en un escrito dirigido al juez que preside el juicio.
Peace insiste al magistrado en que “al Gobierno (de EE.UU.) le preocupa que el acusado y sus co-conspiradores puedan emprender una campaña de acoso, intimidación y/o violencia contra los testigos y sus familias”.
En el texto, la fiscalía asegura que estas medidas estarían destinadas a “proteger la integridad del juicio y la imparcialidad del jurado, con el objetivo de evitar el acoso, la intimidación u otras interferencias con los miembros del jurado, así como mitigar cualquier temor en la mente de los miembros del jurado”.
El fiscal del Tribunal del Distrito Este de Nueva York justifica estas medidas por la “excepcional gravedad de los cargos”, así como por “el historial del acusado de interferir en los procedimientos judiciales”.
Si el juez accede a la petición, los nombres de los miembros del jurado y sus direcciones de casa y trabajo no se revelarán a ninguna de las partes.
Además de preservar su anonimato, los fiscales también solicitan que todos los miembros del jurado sean transportados al juzgado y a sus residencias por agentes judiciales y que estén aislados del público durante su estancia en el tribunal.
Está previsto que el juicio contra el ex ministro mexicano comience el próximo 24 de octubre.
García Luna dirigió entre 2001 y 2005 la extinta Agencia Federal de Investigación mexicana, encargada de combatir la corrupción y el crimen organizado, y entre 2006 y 2012 fue secretario de Seguridad Pública, durante el gobierno de Felipe Calderón.
Según la Fiscalía, “el acusado utilizó sus cargos oficiales para ayudar al cártel de Sinaloa, un famoso cártel de la droga mexicano, a cambio de sobornos multimillonarios” y añadió que tiene previsto llamar a declarar a “numerosos testigos” que han sido partícipes de la violencia ejercida por este cártel mexicano para “protegerse de sus rivales, luchar por su territorio y silenciar a quienes cooperaran con las fuerzas de seguridad”.
Estos testigos, según el escrito, incriminarán a García Luna y afirmarán que recibió pagos para ayudar al grupo criminal.