El gigante cárnico mundial JBS, víctima de un ciberataque a finales de mayo, pagó 11 millones de dólares en bitcoin a los piratas informáticos, según declaró el miércoles el director general de la filial estadounidense del grupo al Wall Street Journal.
“Fue muy doloroso pagar a los criminales, pero hicimos lo correcto para nuestros clientes”, dijo Andre Nogueira al periódico.
JBS, la segunda empresa del sector en Estados Unidos, es responsable de hasta el 20% de los productos cárnicos procesados en el país.
Tras el ataque, las cinco mayores plantas de JBS en Estados Unidos fueron cerradas por completo, mientras que la Casa Blanca señaló a Rusia como responsable último del ciberataque.
La multinacional brasileña tiene operaciones en Estados Unidos, Australia, Canadá, Europa, México, Nueva Zelanda y Gran Bretaña.