WASHINGTON. Estados Unidos dio a conocer los nombres de más de 50 funcionarios y ex funcionarios de El Salvador, Guatemala y Honduras, a quienes considera “actores corruptos y antidemocráticos” y les prohibió la entrada al país.
El gobierno de Joe Biden atribuye a la corrupción en el llamado Triángulo Norte centroamericano gran parte de las condiciones que motivan la migración irregular hacia la frontera sur, que en los últimos meses ha registrado cifras récord.
“Hoy damos un paso más en la lucha contra la corrupción en Guatemala, Honduras y El Salvador al anunciar restricciones de visado a actores corruptos y antidemocráticos”, dijo en Twitter el secretario de Estado, Antony Blinken.
“La corrupción socava la democracia y la confianza de los ciudadanos. Una mejor gobernanza significa un futuro mejor”, añadió.
La lista, conocida como la Lista Engel, fue presentada al Congreso en virtud de un proyecto de ley patrocinado por el entonces legislador Eliot Engel, que otorgaba al Departamento de Estado 180 días para identificar a aquellos que en los tres países centroamericanos estuvieran involucrados en “corrupción significativa”, obstruyeran la justicia o socavaran la democracia.
La lista incluye a ex presidentes, ministros, legisladores y jueces: 21 de Honduras, 20 de Guatemala y 14 de El Salvador. Los ex presidentes Álvaro Colom (2008-2012) de Guatemala, acusado de anomalías en un contrato de transporte público, y Porfirio “Pepe” Lobo (2010-2014) de Honduras, acusado de recibir sobornos de la organización de narcotraficantes Los Cachiros, están entre las figuras más destacadas.
Varios nombres difundidos por el Departamento de Estado ya habían sido incluidos en una lista reducida publicada en mayo, que fue depurada y ampliada.
De El Salvador destacan personas cercanas al presidente Nayib Bukele: su jefa de gabinete, Carolina Recinos, y el ministro de Trabajo, Rolando Castro. También están el ex ministro de Seguridad, Rogelio Rivas, y el ex ministro de Agricultura, Pablo Anliker Infante.
También aparece el actual magistrado del Tribunal Supremo Electoral, Luis Guillermo Wellman Carpio, acusado de tabular los resultados “para su beneficio personal” y “permitir la influencia maligna de los chinos durante las elecciones”.
De Guatemala destaca Nester Vásquez, recién juramentado como magistrado de la Corte de Constitucionalidad, órgano que está por encima de la Corte Suprema de Justicia y que es fundamental para dirimir casos políticos y constitucionales.