BEIRUT. El Líbano se quedó sin suministro público de electricidad después de que las dos principales centrales eléctricas dejaran de funcionar en las últimas horas por falta de combustible, apagando por completo este servicio que venía proporcionando sólo una o dos horas de luz cada día a los hogares.
“La red eléctrica libanesa ha dejado de funcionar por completo este mediodía y es poco probable que funcione hasta el próximo lunes o (que se corte) durante varios días”, dijeron las autoridades.
El cese de las operaciones en las plantas de Deir Amar y Zahrani redujo el suministro a menos de 270 megavatios y, en consecuencia, la red “entera” dejó de funcionar, informó la compañía eléctrica estatal, Electricité du Liban, en la Agencia Nacional de Noticias.
La parada de las dos centrales eléctricas “afectó directamente a la estabilidad de la red eléctrica y provocó su interrupción total, sin posibilidad de reanudar el funcionamiento mientras tanto”, según el comunicado.
El ejército libanés accedió a proporcionar seis mil kilolitros de gasóleo distribuidos a partes iguales entre las dos centrales, dijo la compañía eléctrica.
Esta cantidad garantizará el suministro de electricidad en el Líbano durante tres días, dijo.
Desde hace varios meses, el suministro público de electricidad es muy limitado, por lo que la población depende de la contratación de generadores privados, también alimentados por combustible y cuyo precio se ha disparado debido a la escasez general de éste.
La empresa estatal explicó que “por el momento” no puede hacer nada más para que la red vuelva a funcionar debido a las “difíciles condiciones de funcionamiento”, la “baja capacidad de producción” y “la existencia de importantes estaciones de transferencia fuera del control de la institución”.
Muchos libaneses suelen recurrir a generadores privados alimentados por gasóleo, aunque escasean.
El pequeño país mediterráneo se encuentra inmerso en una de las peores crisis económicas del mundo en más de siglo y medio, con una grave escasez de bienes y servicios básicos como medicamentos, suministros médicos, combustible, electricidad y agua corriente.