Los hospitales de América se están llenando “peligrosamente” de enfermos, advirtió este miércoles la Organización Panamericana de la Salud (OPS) sobre la pandemia del Covid, que sigue exponiendo la desigualdad entre países en el acceso a las vacunas, cuyas patentes Estados Unidos abogó por liberar.
“Los hospitales de la región están peligrosamente llenos”, advirtió Carissa Etienne, directora de la OPS, la oficina de la Organización Mundial de la Salud (OMS) en el continente, en una conferencia de prensa virtual.
La semana pasada, el 40% de las muertes por Covid-19 en el mundo se produjeron en la región, donde más países que nunca están reportando más de 1.000 casos por día, según Etienne.
A pesar de los esfuerzos realizados el año pasado para ampliar la capacidad de los hospitales, en abril de este año la ocupación media de las camas de las unidades de cuidados intensivos era del 80%, según un estudio de la OPS sobre 16 países de la región.
Y aunque durante gran parte de la pandemia la mayoría de los pacientes hospitalizados eran personas mayores con enfermedades preexistentes, Etienne advirtió que las hospitalizaciones y muertes de adultos jóvenes están aumentando a medida que la pandemia de covid-19 se acelera en la región.
En América Latina y el Caribe se han producido más de 934.000 muertes y casi 30 millones de infecciones, según datos de AFP.
La brecha se amplía entre los países ricos, donde las campañas de vacunación permiten un levantamiento progresivo de las restricciones, y las naciones más pobres.
Ante esta situación, el gobierno de Estados Unidos anunció el miércoles su apoyo a un levantamiento global de las protecciones de las patentes de las vacunas Covid-19 para acelerar su producción y distribución en todo el mundo.
Aunque los derechos de propiedad intelectual para las empresas son importantes, Washington “apoya la renuncia a esas protecciones para las vacunas Covid-19“, dijo la representante comercial de Estados Unidos, Katherine Tai, en un comunicado.
“Esta es una crisis sanitaria mundial y las circunstancias extraordinarias de la pandemia de covid-19 requieren medidas extraordinarias”, añadió.
La funcionaria dijo que Washington está participando “activamente” en las negociaciones que se llevan a cabo en la Organización Mundial del Comercio (OMC) para conseguir esa exención.
“Felicito a Estados Unidos por esta decisión histórica”, tuiteó el director de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, quien pidió que se actúe “todos juntos rápidamente, en solidaridad, para aprovechar el ingenio y el compromiso de los científicos que produjeron las vacunas contra el covid-19 que salvan vidas.”
En una muestra de la desigualdad en el acceso a las vacunas, Canadá aprobó el miércoles el uso de la vacuna de Pfizer-BioNTech a partir de los 12 años, convirtiéndose en el primer país que la autoriza para estos jóvenes, y Estados Unidos hará lo propio la próxima semana.
Se han administrado más de 1.200 millones de dosis en todo el mundo, pero menos del 1% se inyectaron en los países menos desarrollados.
Después de que la OMS pidiera la solidaridad del G7, los miembros de ese grupo (Estados Unidos, Japón, Canadá, Alemania, Francia, Reino Unido e Italia) discutieron la distribución de vacunas durante una reunión en Londres.
En su comunicado, el G7 prometió apoyo financiero al programa de distribución de Covax “para permitir un despliegue rápido y justo” de las vacunas, aunque no anunciaron ayudas adicionales para los países pobres.
India es uno de los países que pide que se levanten temporalmente las patentes de las vacunas, mientras que otros, como Francia, abogan por hacer donaciones a las naciones más desfavorecidas.
El gigante asiático registró 3.780 muertes y 382.000 casos de covid-19 en 24 horas, en plena segunda ola de la pandemia. El coronavirus se cobró más de 222.000 vidas en el país y dejó cerca de 20,3 millones de enfermos, una cifra que muchos consideran muy inferior a la realidad.
Esta situación se atribuye sobre todo a las concentraciones religiosas, como la enorme peregrinación hindú Kumbh Mela, que atrajo a millones de personas, y a los mítines políticos autorizados en los últimos meses, así como a la inacción del gobierno de Narendra Modi.
Los hospitales están desbordados y escasean los suministros de oxígeno, los medicamentos y las camas, a pesar de la afluencia de ayuda internacional.
El miércoles, India anunció la concesión de 6.700 millones de dólares en préstamos para financiar a los fabricantes de vacunas, hospitales y empresas sanitarias.
La pandemia ha matado a más de 3,2 millones de personas en todo el mundo desde que la oficina de la OMS en China informó del brote de covid-19 a finales de diciembre de 2019, según un recuento realizado por AFP con datos oficiales.