El abastecimiento de medicamentos para los próximos meses en el sector público es incierto. Ante los problemas en la compra consolidada internacional de fármacos impulsada por el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador para este año, junto con la Oficina de las Naciones Unidas de Servicios para Proyectos (UNOPS), los directores de los institutos nacionales de salud, hospitales y autoridades sanitarias de las 32 entidades federativas tienen la instrucción de comprar por su cuenta más de mil claves de medicamentos y material de curación para evitar el desabasto.
Según un informe del Instituto Médico Farmacéutico (Inefam), entre los medicamentos que corren el riesgo de agotarse en los anaqueles de los hospitales públicos se encuentran productos básicos como el amlodipino, utilizado para tratar la hipertensión y las enfermedades del corazón; la loratadina y la clorfenamina, para pacientes alérgicos, y la insulina, vital para los diabéticos.
UNOPS asegura que la entrega de medicamentos se ha cumplido tal y como se había prometido y garantiza que a finales de abril estarán disponibles los resultados de las licitaciones internacionales que aún se están negociando, para continuar con la entrega de medicamentos en mayo.
El 26 de febrero, el Coordinador de Abastecimiento del Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi), Adalberto Javier Santaella Solís, emitió una circular a todos los directores de los institutos de salud pública federal y de los 32 estados.
En el oficio INSABI-UCNAMEMCA-91-2021, el funcionario les pidió que adquieran con sus propios medios mil 391 claves de medicamentos y materiales de curación que no fueron incluidos en la compra consolidada internacional que hizo el gobierno federal, además de 227 claves que no fueron ofertadas en las licitaciones.
Incluso en el caso de los medicamentos que sí fueron incluidos, la circular exigía a los titulares de cada dependencia la firma de contratos para garantizar su abastecimiento hasta junio, mientras se iniciaba el proceso de suministro de la compra concertada.
“Respecto a las claves sin oferta de los procedimientos ITB (Invitation to Bid), realizados por la UNOPS, las instituciones deben garantizar el suministro hasta junio de 2021, mientras Insabi realiza el procedimiento de contratación para el suministro de los meses de julio a diciembre de 2021.
“En cuanto a las claves que sí cuentan con una oferta en los procedimientos ITB realizados por UNOPS, las instituciones participantes deberán realizar las acciones que consideren necesarias para contar con el suministro suficiente hasta junio de 2021… para que se inicien las entregas”, agrega el aviso oficial.
El Inefam señala que para la compra consolidada de la UNOPS de 2021 hubo 141 claves de medicamentos sin oferta en los procesos de licitación -86 menos de las reconocidas por el Insabi-, que equivalen a 40.6 millones de piezas por un monto de 14 mil 115.8 millones de pesos.
Entre estos medicamentos destaca el amlodipino con irbesartán, fármaco que se popularizó en febrero de 2018, cuando López Obrador, siendo aspirante a la Presidencia de la República, recomendó usarlo a Enrique Peña Nieto para calmar sus nervios y no interferir en la elección federal que se llevó a cabo ese año.
Pero más allá del mensaje irónico del tabasqueño, este medicamento se utiliza para tratar la hipertensión arterial y combatir los problemas del corazón.
Para este medicamento, la UNOPS abrió una licitación para la compra de 11.7 millones de piezas, por un monto de 11,100.6 millones de pesos, la cual quedó desierta por falta de postores.
El fracaso de la compra consolidada de este medicamento ha provocado que algunos hospitales comiencen a adquirirlo por su cuenta para evitar el desabasto, según datos del portal de compras gubernamentales Compranet.
En febrero, el IMSS realizó tres compras de Amlodipino con las empresas Gadmar, Proveedora de Medicamentos Doca y Farmacia Margarita.
Adquirió 154 mil 759 piezas por 1.8 millones de pesos, cantidad que representa apenas el 1.3 por ciento de las piezas de amlodipino solicitadas por la UNOPS en la compra consolidada.
José Carlos Ferreyra, presidente del Inefam, indicó que esta compra fue errónea desde el principio, pues además de que el código del medicamento era incorrecto, era ilógico destinar más de 11 mil millones de pesos a un solo medicamento cuando, por ejemplo, el gasto anual de todo el grupo de oncología en el sector público es de 15 mil millones.
Además del amlodipino, el informe del Inefam destaca la loratadina y la clorfenamina entre los medicamentos sin ofertas en la licitación de la UNOPS, ambos utilizados para tratar alergias.
De la primera, la agencia de la ONU solicitó 5,4 millones de piezas por unos 28,8 millones de pesos. Al declararse desierta la licitación, el IMSS recurrió a la compra de 6 mil 865 frascos de loratadina a Gadec, por los que pagó 65 mil 904 pesos,