Las autoridades tailandesas anunciaron el viernes un toque de queda nocturno en Bangkok y otras 9 provincias, entre otras medidas, en su peor momento de la pandemia, que también se ha agravado en el resto de la región debido a la variante delta del Covid-19.
La portavoz del centro de control de Covid-19, Apisamai Srirangsan, dijo en una rueda de prensa que el toque de queda será entre las 9 de la noche y las 4 de la mañana y que las restricciones entrarán en vigor el próximo lunes durante los próximos 14 días.
Las medidas también incluyen el cierre de los centros comerciales, aunque los restaurantes, supermercados y otros establecimientos de productos básicos podrán abrir con un horario limitado, mientras que se desaconsejan los viajes interprovinciales y se recomienda el teletrabajo.
Desde el pasado mes de abril, los colegios imparten clases por Internet y los bares permanecen cerrados, mientras que desde finales de junio sólo se permite a los restaurantes y cafeterías servir comida y bebida a domicilio.
Las restricciones afectan a la capital y a cinco provincias vecinas, donde la variante delta avanza rápidamente, y a cuatro provincias del sur, donde prevalece la variante beta del nuevo coronavirus.
Las autoridades informaron hoy de 9.276 casos y 72 muertes, lo que eleva el total a 317.506 infecciones, incluidas 2.534 muertes, desde el comienzo de la pandemia.
Según los datos oficiales, 3,24 millones de personas han sido vacunadas contra el covid-19 con medicamentos de la empresa china Sinovac y de la sueco-británica AstraZeneca, lo que representa el 4,8% de la población.
La pandemia también se ha agravado rápidamente en las últimas semanas en otros países de la región como Vietnam, Malasia y, sobre todo, Indonesia, donde en algunos hospitales ha faltado oxígeno para los pacientes.