China ha erradicado el paludismo tras 70 años de lucha contra esta enfermedad transmitida por un mosquito que mató a más de 400.000 personas en 2019, sobre todo en África, anunció el miércoles la Organización Mundial de la Salud (OMS).
“Felicitamos al pueblo chino por librar al país de la malaria”, dijo el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus. “China se une al creciente número de países que demuestran que un mundo sin paludismo es un objetivo factible”.
“Este éxito tan duramente conseguido es el resultado de décadas de acción centrada y sostenida”, añadió.
El país, con 30 millones de casos al año en la década de 1940, no ha registrado ni un solo caso autóctono en los últimos cuatro años. La enfermedad parasitaria, transmitida por el mosquito Anopheles, mató a más de 400.000 personas en 2019, principalmente en África.
Los países que han registrado tres años consecutivos sin transmisión local pueden solicitar la certificación de la OMS para validar su condición de libres de malaria. Deben presentar pruebas muy rigurosas y demostrar su capacidad para prevenir la enfermedad en el futuro.
China es el 40º territorio que obtiene esta validación de la OMS, con sede en Ginebra. Los últimos fueron El Salvador (2021), Argelia y Argentina (2019), y Paraguay y Uzbekistán (2018).
China es el primer país de la región del Pacífico Occidental, según la nomenclatura de la OMS, que recibe esta validación en más de 30 años. Hasta ahora solo otros tres lo habían conseguido: Australia (1981), Singapur (1982) y Brunei (1987).
En su Informe Mundial sobre el Paludismo 2020, publicado en noviembre, la Organización señaló que los avances en la lucha contra la enfermedad están estancados, especialmente en los países africanos, donde se registran los peores registros en términos de infecciones y muertes.