Inconsolable, la madre de Brandon no dejaba de abrazar el féretro del pequeño que murió tras el derrumbe del Metro en la estación Olivos de la Línea 12.
Dos días después del accidente, la familia del niño le dio el último adiós, reflejando la tragedia que vivieron todos los afectados por el derrumbe.
Brandon Giovanny Hernández, de 12 años, cuyo paradero se desconocía tras la tragedia en la Línea 12 del Metro, fue encontrado muerto tras una exhaustiva búsqueda por parte de su madre y de las autoridades capitalinas.
Es el único menor de edad en la lista oficial de fallecidos, ya que la edad de las víctimas oscila entre los 30, 40 y 50 años.
El deceso fue confirmado por la Procuraduría capitalina al señalar que fue identificado por sus familiares en la coordinación territorial de Iztapalapa-6.
Horas antes, la Fiscalía emitió una Alerta Amber para buscarlo, detallando que vestía playera negra, sudadera negra, pantalón negro con rayas blancas y tenis negros.
El menor viajaba en compañía de un adulto en el Metro y se dirigían de regreso a su casa, tras la tragedia, su madre se enteró de la noticia en redes sociales y emprendió la búsqueda en el lugar.
“La madre del adolescente refirió que se trasladó al lugar del accidente y comenzó a buscar a ambas personas, por lo que localizó al adulto en la madrugada de este martes, internado en el Hospital General Balbuena, pero no a su hijo”, explicó la Fiscalía.
Su caso cobró resonancia cuando se hizo viral un video en el que se ve a la madre y a la abuela del pequeño pidiendo a gritos la aparición de su pariente, mientras los políticos panistas les insistían para que procedieran penalmente contra las autoridades capitalinas.
