Un terremoto sacudió el sábado Milán, en el norte de Italia, haciendo que algunas personas salieran a la calle, pero no hubo informes inmediatos de daños, dijeron los servicios de emergencia.
El temblor, de una magnitud estimada de 4,4 por el Instituto Nacional de Geofísica y Vulcanología, se sintió en toda la región de Lombardía, pero los bomberos dijeron que no habían recibido ninguna llamada de socorro.
El epicentro fue en Bonate Sotto, una ciudad cercana a Bérgamo. Su alcalde, Carlo Previtali, dijo a los periodistas que no había “ningún pánico o alarma particular” entre los residentes.
La mayoría de los terremotos en Italia son leves y causan pocos o ningún daño.
El último de gran impacto, un terremoto de 5,3 grados que sacudió el centro de Italia en 2017, mató a 34 personas.