Al menos ocho personas murieron y 24 resultaron heridas hoy en un tiroteo en el campus de la Universidad de Perm, en los Urales, informaron las autoridades.
“Hay ocho muertos y varios heridos”, dijo el Comité de Investigación de Rusia en un comunicado.
Los servicios sanitarios de la región añadieron que los heridos sufren “lesiones graves” por el tiroteo.
Los investigadores han identificado al atacante, que es un alumno del centro educativo, estudiante de la facultad de Derecho.
El joven resultó herido al resistirse a las fuerzas del orden durante la operación de detención y se encuentra actualmente en la unidad de cuidados intensivos de un hospital local.
El atacante estaba armado con “una escopeta” y “un cuchillo”, según el agente que lo neutralizó.
El servicio de prensa de la universidad atacada informó esta mañana del suceso a través de un mensaje en las redes sociales en el que aseguraba que los profesores y alumnos del centro se habían encerrado en las aulas tras escuchar disparos.
Uno de los estudiantes de la Universidad de Perm declaró al portal local 59.ru que “el atacante comenzó a disparar nada más entrar en las instalaciones” del centro.
“Estuvimos encerrados en un aula durante una hora, éramos unos 60”, dijo el estudiante.
Las imágenes del lugar de los hechos indican que el agresor también disparó contra los vehículos aparcados en la zona de la universidad antes de apuntar con el arma a las personas.
Varios estudiantes saltaron por las ventanas para ponerse a salvo del tiroteo.
El presidente ruso, Vladimir Putin, expresó sus condolencias a las familias de las víctimas, mientras que el primer ministro del país, Mijail Mishustin, envió al lugar de los hechos a los responsables de las carteras de Sanidad y Educación.
Las autoridades locales declararon un día de luto por las víctimas del tiroteo y suspendieron las clases en todas las escuelas y universidades de Perm, que recibieron instrucciones de reforzar “todas sus medidas de seguridad” antes de reanudar el trabajo.
En mayo de 2021, un antiguo alumno de una escuela de Kazán, en la república rusa de Tatarstán, abrió un tiroteo en el centro educativo que dejó nueve muertos y 23 heridos, la mayoría de ellos niños.