Las chicatanas son hormigas que salen de sus hormigueros después de la primera gran lluvia del año, alrededor de junio y julio. Estos insectos tienen alas y pululan por todos lados. Los recolectores tienen pocas horas para juntar la mayor cantidad de chicatanas a mano, ya que no volverán a verse hasta el próximo año.
En México, las chicatanas se recolectan principalmente en los estados de Oaxaca, Veracruz y Chiapas. Son consideradas uno de los manjares más deliciosos de la comida mexicana. Se consumen asadas sobre un comal de barro y se utilizan para preparar salsa o como ingrediente en el mole.
El precio de las chicatanas puede variar, en Mercado Libre se pueden encontrar 250 g por alrededor de 700 pesos, mientras que en el mercado de San Juan en la Ciudad de México, el kilo ronda entre los 1,600 y 2,200 pesos. La chicatana está amenazada de extinción debido a la invasión humana en su territorio y el uso de agroquímicos. La producción y venta de las chicatanas es volátil debido a su vulnerabilidad.
Ciclo de vida de las chicatanas
El ciclo de vida de las chicatanas, también conocidas como hormigas de San Juan, es anual. Estas hormigas salen una vez al año para reproducirse en el aire, aprovechando la circunstancia del suelo húmedo para hacer sus nidos. Su ciclo normal comienza a finales de junio.
Las chicatanas tienen diferentes etapas en su ciclo de vida:
- Huevos: La hembra fertilizada pone los huevos en el nido. Los huevos son pequeños y blancos, y tardan aproximadamente de dos a tres semanas en eclosionar.
- Larvas: Las larvas emergen de los huevos y son alimentadas por las obreras en el nido. Pasan por varias etapas de desarrollo, mudando su piel varias veces.
- Pupa: Las larvas se transforman en pupas, que son similares a un capullo. Durante esta etapa, no se alimentan y experimentan cambios internos en su cuerpo.
- Adultos: Las pupas emergen como adultos completamente formados. Los machos y las hembras se aparean en el aire y luego las hembras buscan lugares adecuados para iniciar nuevas colonias.
Es importante destacar que, en los últimos años, la presencia de las chicatanas en las calles y avenidas ha disminuido en zonas urbanizadas debido al uso de tecnología, como la telefonía celular y las emisiones de ondas magnéticas. Además, el uso común de hornos de microondas en los hogares también puede afectar a estas especies tan pequeñas y susceptibles a las ondas.
¿Dónde se encuentran las chicatanas en México?
Las chicatanas se encuentran principalmente en la región mixteca de México, específicamente en los estados de Puebla, Guerrero y Oaxaca. Estos estados son conocidos por ser el hogar de estas hormigas arrieras. Sin embargo, también se pueden encontrar en otros estados como Veracruz, Chiapas, Tabasco y la Península de Yucatán.
Las chicatanas son consideradas las reinas de las hormigas arrieras y pertenecen a las especies Atta mexicana y A. Cephalotes. Son muy apreciadas en la región por su sabor único y por ser una fuente de proteína.
La recolección de las chicatanas se lleva a cabo durante los primeros días de lluvia, cuando emergen de sus nidos para ser fecundadas. Una vez recolectadas, se les quitan las alas, las patitas y la cabeza, dejando solamente la parte trasera. Las chicatanas se pueden comer de varias formas, como en salsas, en mole o simplemente asadas. Después de recolectarlas, se ponen en agua para ahogarlas y luego se les realiza la preparación culinaria deseada.
Beneficios de las chicatanas
Las chicatanas, también conocidas como hormigas voladoras, son insectos que tienen diversos beneficios para nuestra alimentación y salud. En la región de Huatusco, en México, estas pequeñas criaturas se consumen como alimento y también se utilizan para tratar la artritis.
Un beneficio destacado de las chicatanas es su alto valor nutricional. Estos insectos son una fuente de proteínas y nutrientes de alta calidad, lo que los convierte en una opción saludable para complementar nuestra dieta. Además, su consumo es beneficioso para el medio ambiente, ya que su producción es de bajo impacto y emiten cantidades mínimas de gases de efecto invernadero.
Es crucial resaltar que las chicatanas no solo se pueden consumir directamente, sino que también se pueden utilizar como ingredientes en la cocina. Su sabor único y característico aporta un toque especial a una variedad de platillos. Desde deliciosos guisos y salsas hasta sopas y tamales, las chicatanas son un ingrediente versátil que puede añadir un nuevo nivel de sabor a tus comidas.
Es relevante mencionar que aún existe mucho por descubrir en relación a las propiedades medicinales de los insectos, incluyendo las chicatanas. Ampliar el estudio de estos pequeños seres nos permitirá conocer más sobre su potencial para tratar diversas enfermedades y su posible uso en la medicina tradicional. Sin duda, las chicatanas son un tesoro culinario y medicinal que debemos seguir explorando.
Cómo se recolectan las chicatanas
Las chicatanas se recolectan en mayo, junio y julio, durante la temporada de lluvias. La recolección se realiza en la primera lluvia del año, preferiblemente una lluvia ligera que no sea muy fuerte. Cuando el hormiguero se inunda, las hormigas chicatanas salen a la superficie. La recolección se realiza a mano, utilizando una bolsa de plástico húmeda o con un poco de agua para evitar que las hormigas vuelen. Una vez recolectadas, se les quitan las alas, cabeza y patitas, dejando solo el cuerpo de la hormiga.
En la recolección tradicional de las chicatanas, las personas esperan a que la temporada de lluvias comience y se dirigen a los lugares donde se encuentran los hormigueros. Una vez que la lluvia cae, los hormigueros se inundan y las hormigas chicatanas salen a la superficie buscando lugares más secos. Con mucho cuidado, los recolectores las atrapan utilizando una bolsa de plástico húmeda o con un poco de agua para evitar que vuelen. Esta técnica ha sido transmitida de generación en generación en las comunidades donde se consumen las chicatanas.
En la actualidad, también se utilizan métodos más modernos para la recolección de las chicatanas. Algunas personas utilizan aspiradoras de mano que les permiten succionar a las hormigas sin lastimarlas. Esta técnica es menos invasiva y se ha vuelto popular entre aquellos que desean recolectar las chicatanas de manera más eficiente. Otro método moderno es utilizar trampas especiales diseñadas específicamente para atrapar hormigas chicatanas.
- La recolección de chicatanas se realiza en mayo, junio y julio durante la temporada de lluvias.
- Las chicatanas salen a la superficie cuando sus hormigueros se inundan.
- La recolección tradicional se realiza a mano, utilizando una bolsa de plástico húmeda o con un poco de agua para evitar que vuelen.
- En la actualidad, también se utilizan métodos modernos como aspiradoras de mano y trampas específicas para recolectar chicatanas.
Tradiciones y festivales relacionados con las chicatanas en México
En México, los festivales y tradiciones relacionados con las chicatanas se llevan a cabo en el estado de Oaxaca. Estas hormigas rojizas y grandes son recolectadas durante un corto periodo de tiempo, desde principios hasta mediados de junio, y a veces incluso a principios de julio. Las chicatanas son conocidas por cortar y recolectar hojas de árboles que usan como alimento y para cosechar hongos con los que alimentan a sus larvas.
La recolección de las chicatanas es un proceso arduo y laborioso. Después de la primera lluvia de la temporada, cuando la tierra está húmeda, las hormigas arrieras salen a cortar hojas de los árboles cercanos, lo cual sirve como punto de referencia para localizar los hormigueros. Una vez ubicado el nido, la gente sale a los campos en plena madrugada y coloca canastas de carrizo boca abajo sobre los hormigueros antes de que las chicatanas salgan y vuelen.
Después de recolectadas, las chicatanas se “ahogan” en agua y se les retiran las alas, la cabeza y las patas. Luego se asan en un comal de barro hasta que estén crujientes. Estas hormigas son consumidas en diferentes formas, ya sea solas como botana, en tortillas recién hechas o en taco, acompañadas de queso fresco, aguacate y salsa. También se incorporan a platillos más elaborados como salsas, moles, masa para tortillas e incluso tamales. El sabor de las chicatanas es difícil de explicar, pero se describe como una mezcla de avellana, cacahuate, tierra y manteca de cerdo, lo que estimula el paladar con una compleja sinfonía de sabores.
Es significativo destacar que debido a la crisis climática actual y a la gran demanda de restaurantes y gourmands, las colonias de estas hormigas están reduciéndose a cifras peligrosamente bajas.
Riesgos y problemas asociados con las chicatanas y otros insectos comestibles
Las chicatanas son insectos comestibles muy populares en la gastronomía mexicana. Sin embargo, es crucial tener en cuenta ciertos riesgos o problemas asociados con su consumo. A continuación, te mencionamos algunos de los más relevantes:
- Contaminación de agroquímicos: Los insectos, al igual que otros animales, pueden contaminarse con los agroquímicos utilizados en la agricultura. Esto se debe a que estos productos químicos se aplican en los cultivos y pueden llegar a afectar a los insectos que se alimentan de ellos. Para minimizar este riesgo, se recomienda hervir las chicatanas con agua antes de su preparación para eliminar cualquier posible residuo de agroquímicos.
- Falta de regulación: Actualmente, existe una falta de regulación en la venta y consumo de insectos comestibles en México. Esto significa que los mismos lotes de insectos pueden ser comercializados tanto en un tianguis como en un restaurante exclusivo, sin ningún tipo de control de calidad. Para garantizar la seguridad alimentaria de los consumidores, es necesario implementar leyes y normativas que regulen la explotación y consumo de estas especies.
- Amenaza a la diversidad genética: Algunas especies de insectos comestibles, como las chicatanas, se encuentran en grave peligro y amenazadas. La sobreexplotación y la falta de control en su recolección pueden poner en riesgo su diversidad genética y su supervivencia a largo plazo. Para preservar estas especies, es fundamental realizar estudios demográficos y genéticos que permitan conocer el estado de las poblaciones y tomar medidas de conservación adecuadas.
- Origen desconocido: Al consumir insectos comestibles, como las chicatanas, es clave tener cuidado y asegurarse de conocer su origen. Esto se debe a que algunas especies pueden ser recolectadas de forma ilegal o en áreas contaminadas. Conocer el origen de los insectos y asegurarse de que sean seguros para el consumo es fundamental para evitar cualquier riesgo para la salud.